Hyundai Sonata CDRi, llegó el diesel...

Berlina a precio -casi- de utilitario y además... diesel. Se había resistido Hyundai a la implantación mecánica del gasóleo. Ha tenido que llegar la quinta generación del Sonta, una berlina con empaque, para que las cosas cambien en la filosofía productiva del fabricante coreano: 140 CV, cambio de 6 marchas y un buen comportamiento dinámico. También la calidad de los acabados está, como el completo equipamiento de serie, a la altura de las circunstancias. Es verdad que la estética no es uno de sus puntos más fuertes, aunque tampoco es que el Sonata pueda calificarse como un coche «feo». Nuestro protagonista observa las pautas de las berlinas grandes de toda la vida, hace gala de una excelente confortabilidad interior, incluso por su también cuidada insonorización y porque, eso además, la mecánica es moderna y bien equilibrada. Las suspensiones independientes en ambos trenes (multibrazo el trasero), unos frenos potentes y resistentes, amén de una dirección que guía perfectamente los 4,8 metros de largo y la tonelada y media -larga- de coche, acaban por configurar un Sonata turbodiesel de lo más interesante. La «dieselización» del Sonata la configura Hyundai en torno a un tetracilíndrico multiválvulas de rampa directa y con turbo de geometría variable, suficientemente conocido en los catálogos de la marca y que, con una entrega de 140 caballos -unidos a una también impecable caja manual de 6 velocidades- resulta ser la piedra angular de un vehículo muy compensado en todos los aspectos. Reacciones nobles, suspensiones quizá un poco blandas (se prima el confort) aunque no tanto como para que la carrocería balancee en exceso, acaban por configurar un coche muy fácil y agradable de conducir. Eso, por no hablar de unas cifras de consumo acordes con lo que se espera de un diesel rutero; es decir, un vehículo con el que es posible abordar largos recorridos sin necesidad de estar parándose en el surtidor cada dos por tres: alrededor de 8 litros como media de consumo, lo que nos llevará a contabilizar una autonomía levemente por encima de los 800 kilómetros. En suma que, nunca es tarde... Hyundai entre con autoridad en la batalla de las berlinas medio-altas animadas por un gasóleo potenciado.