Citroën C4 Picasso, talla XXL...

Citroën vuelve a confiar el mágico apellido del genial pintor español, Pablo Picasso, al proyecto «B-587». El nuevo monovolumen de la familia C4, una de cuyas mayores bazas radica en la modularidad de sus siete plazas individuales. Se presentará a finales de este mes de septiembre en el Salón de París y comenzará a venderse en octubre, aunque no será hasta la primavera de 2007 cuando pueda disponerse de la versión corta de cinco plazas. Eso sí, el fabricante anuncia que el actual Xsara Picasso continuará produciéndose, el menos, durante los dos próximos años. Concebido como un producto que incluso podría ponerle las cosas difíciles a modelos altos de gama del chevron -entiéndase el monovolumen C8- el nuevo C4 Picasso se realiza sobre la llamada Plataforma 2 de PSA, es decir, la misma que se utiliza para el Peugeot 307 SW y el Citroën C-Ttriomphe, con una panorámica distancia entre ejes: 2,73 metros, lo que supone un incremento de 13 centímetros suplementarios sobre la batalla de un C4 normal y que lleva la longitud total del nuevo Picasso hasta los 4,59 metros. Su anchura se cifra en 1,83 metros y en 1,66 metros su altura. Incluso para alojar holgadamente las tres filas de asientos -la última con dos plazas- se ha incrementado en 5 centímetros la vía trasera, mientras la delantera se mantiene inalterable con respecto a las cotas del C4. Estéticamente muy dinámico -para tratarse de un monovolumen- y con detalles tan innovadores como los pilotos traseros que se enseñorean verticalmente de buena parte de la zaga, el C4 Picasso pone su punto de inflexión estético-práctico en un parabrisas de dimensiones auténticamente «descomunales». Tan es así, que el coche viene a duplicar su grado de visibilidad delantera merced a un ángulo vertical de 70 grados, cuando lo habitual es que no se superen los 35 grados. Un tamaño que ha obligado a la realización d unos parasoles corredizos también acordes con las dimensiones del parabrisas. Puede también incorporarse opcionalmente un techo acristalado panorámico, con lo que la superficie acristalada del vehículo alcanzará entonces los 6,4 metros cuadrados. En el interior, además de las siete plazas individuales y modulables, el nuevo Picasso hereda de la gama C4 la instrumentación digital central, con dos amplias guanteras a ambos lados, y el volante de núcleo central fijo con, además, la particularidad de una pequeña palanca de cambios situada en la propia columna de la dirección -¿se acuerdan del «Tiburón»?- que no roba un ápice de espacio entre los asientos y que comanda una nueva caja de cambios robotizada de 6 marchas. La gama del C4 Picasso se declinará en, al menos, tres niveles de equipamiento y contará con elementos como el airbag de rodillas para los ocupantes de las plazas delanteras, cristales laterales laminados (como el C6), freno de estacionamiento eléctrico y automático, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, faros direccionales, alerta de cambio de carril y DVD con pantallas alojadas en los respaldos de los delanteros... por hablar sólo de algunos de los gagedts más significativos. La antena de la radio se aloja en los cristales de las ventanas traseras y se monta un climatizador cuatrizona, con aireadores para la tercera fila de asientos y hasta para el maletero. La gama de motores estará inicialmente compuesta por dos gasolina y otros dos turbodiesel, todos ellos con culatas multiválvulas y los HDI dotados de filtro de partículas FAP: 1.8 (127 CV), 2.0 (143 CV); 1.6 HDI (110 CV) y 2.0 HDI (138 CV). La segunda fase de comercialización del C4 Picasso conocerá la implantación del motor de gasolina 1.6 litros desarrollado conjuntamente con BMW y que contará con turboalimentación «Twin Scroll» que mejora el tiempo de repuesta del turbo. En opinión de los diseñadores, la propuesta del nuevo C4 Picasso viene a marcar «un antes y un después» en la concepción y desarrollo de los monovolúmenes compactos.