Renault Egeus, antagónico... sólo en las puertas

Ya hay quien quiere ver en el Egeus los trazos, y hasta las aplicaciones, del futuro Laguna; aunque... quizá se a mucho decir. De momento, este Concept Car , Renault se resiste a llamarlo prototipo, «por la sencilla razón de que no es el primero de una serie», avanza lo que podrían ser las innovaciones tecnológico-prácticas de futuros modelos de gran serie firmado por el rombo: puertas antagónicas, interior lujoso y confortable tan digno de una berlina de gama alta... que acaba por convertirse en todo un SUV cuya longitud del capó delantero refuerza la fluidez de un diseño a medio camino entre la berlina y el coupé y al que, por faltar, ni siquiera falta la tracción integral en sus cuatro ruedas. Sea como fuere, háganse las cábalas y conjeturas que se quiera -también ellas, las conjeturas, forman parte del «espectáculo»-, el caso es que, para su fabricante, el Egeus encarna todo un difícil equilibrio entre elegancia, deportividad y fuerza. El largo capó, los recortados voladizos delantero y trasero y las aletas posteriores curvadas, confieren al Egeus una sensación visual de dinamismo y potencia. Las grandes ruedas de 22 pulgadas, asociadas a una distancia al suelo bastante superior a la de una berlina clásica, le conceden la fuerza. El diseño de la parte delantera, sencillo y suave, queda patente en las (teóricas) líneas que unen el capó con el montante de un redondeado parabrisas que llega a integrarse con la «burbuja» del techo panorámico acristalado. Además, la «burbuja» que configura la luneta zaguera, resulta ser una prolongación de la del parabrisas, continuando así la general línea fluida del diseño de la carrocería... con el aerodinamismo de un coupé. El concept Egeus está equipado con un motor V6 diesel de 250 CV, con filtro de partículas, unido a un cambio automático secuencial (con levas en el volante) de 7 velocidades y a un sistema de tracción integral 4x4 con regulación de motricidad de 0 a 100%, según lo demanden las condiciones de adherencia. Los faros del Egeus, en forma de boomereng (Valeo), resultan ser un sistema óptico compacto a base de «leds» (diodos electroluminiscentes) de alto rendimiento y durabilidad que incorporan las funciones de luz de cruce, carretera, luces direccionales y un conjunto combinado para los intermitentes y las luces de día con, además, la posibilidad de adaptarse, en cantidad y reparto lumínico, a las condiciones de la conducción. En una carretera sinuosa, la orientación del haz luminoso se modula electrónicamente y en autopista se activan los diodos, para modular automáticamente el alcance óptimo del haz sin deslumbramiento para los demás conductores. También se montan unos neumáticos (Michelin) con dibujo de baja resistencia a la rodadura, con diferente dibujo en los delanteros y traseros para optimizar el comportamiento dinámico del coche en los apoyos, y montados sobre unas llantas (Montupet) de aleación ligera (22 pulgadas). El dibujo compacto y cerrado de este tipo de neumáticos minimiza las deformaciones y, en consecuencia, las pérdidas de energía. La parte central de los delanteros, menos recortada y con depósito, resulta efectiva en la transmisión de potencia y a la adherencia sobre piso mojado, mientras los neumáticos traseros están concebidos con una mayor zona de contacto para optimizar su comportamiento en curva.