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Publicado por
León

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Aspecto renovado -se diría «imponente»-, lo que se traduce en significativas innovaciones en practicidad y diseño. Y, lo más impactante, la rueda de repuesto que desaparece... bajo el piso del maletero. El portón trasero cambia su, hasta ahora, apertura lateral por otra vertical. La ausencia de la rueda de repuesto exterior trae aparejado un recorte de 8 centímetros en la longitud total, lo que no significa reducción de habitabilidad ni de capacidad del maletero, habida cuenta que se trata sólo de una merma de voladizo posterior. Así de drásticas, y contundentes, resultan ser las modificaciones que aparecerán en la cuarta generación del todocamino nipón a partir de diciembre o posiblemente principios de 2007, que será cuando el nuevo CR-V comience a desembarcar en los concesionarios de Honda. Con estos mimbres, y una tercera luna lateral triangular que le proporciona un aspecto más sólido, el CR-V hará gala de una mejor aerodinámica, que le vendrá de maravilla a un diseño cada día menos cuadradote y que, en consecuencia, se beneficia de las nuevas tendencias de un segmento, el de los SUV, cada día más en alza. Una original entrada de aire y unos faros delanteros bastantes más altos que los de la actual versión, acaban por configurar un CR-V cuya vista frontal acaba por configurar un vehículo estéticamente mucho más agradable. El interiorismo es lo que menos cambia en el nuevo CR-V, aunque es verdad que se ha ganado en calidad y disposición de ciertos elementos. Sigue manteniéndose la disposición y forma de los asientos, también la posibilidad de regulación longitudinal de las plazas traseras, que continúan siendo tres (la central un tanto exigua, aunque plegada puede usarse como reposabrazos). El salpicadero también sufre modificaciones, como es el caso de la palanca de cambios situada en él; es decir, como en la versión automática del actual CR-V, lo que se traduce en una ligera ganancia de espacio entre los dos asientos delanteros. El fabricante anuncia hasta una veintena de huecos portaobjetos. Además, y esto sí que es una ganancia práctica, se ha rebajado en 32 milímetros la altura de acceso al coche. En el apartado motorístico no hay novedades. Se mantiene la mecánica de gasolina (150 CV), con optimización en la cifra de consumo, y también permanece invariable el turbodiesel 2.2 CTDi de 140 CV, considerado una de las perlas del fabricante... y del segmento de militancia. Donde sí que hay cambios es en las cajas «de idem», que ganan ambas (manual y automática) una marcha: 6 manual y 5 automática. Mientras el sistema de tracción 4x4 tampoco varía prácticamente nada, manteniéndose la aplicación de tracción delantera y el paso automático a tracción integral cuando las condiciones de adherencia -ausencia de ella, más bien- así lo requieran.