Art/Salamanca: una opción diferente
La galería Cubo Azul consolida y diversifica su presencia en ferias de arte contemporáneo con su participación en el encuentro de Salamanca
El planteamiento desde el que nace y el hecho de que el número de galerías representadas no sea excesivo hacen de la feria de arte contemporáneo de Salamanca un evento con algunas características particulares, distintas del común denominador de las ferias al uso. Auspiciada por la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura, los planteamientos del evento no se quedan en servir exclusivamente como vínculo comercial entre coleccionistas y galerías, sino que entre sus objetivos está propiciar el contacto entre artistas y galeristas con la intención de que se puedan desarrollar proyectos de otra índole. Por tanto, se hace hincapié en fomentar y convertir la feria en un acontecimiento cultural importante con independencia de que conviva con las relaciones comerciales que son consustanciales a la celebración de estos encuentros. Otra característica específica de Art/Salamanca que ahonda en estos mismos planteamientos es el hecho de que la feria esté tematizada. En esta ocasión, el tema-concepto elegido ha sido el de «mascarada». El DA2, fundamentalmente, y otros espacios de arte han convertido todo el espacio expositivo de Salamanca en una enorme presentación y reflexión en torno a este tema. La feria no se ha desmarcado, y conceptualmente se ha vinculado también a la propuesta: todas las galerías han presentado en sus stands una obra relacionada con este tema. Está también entre las intenciones de la feria que galerías de nuestra comunidad tengan un soporte más desde el que proyectarse -en esta ocasión, se dedicaron cinco stands a las propuestas de nuestra comunidad-. De las veinte galerías presentadas, la gran mayoría son españolas, sin que debamos olvidar a las representantes de Portugal. En lo que se refiere a la representación leonesa, en el capítulo de galerías estuvo presente Cubo Azul. Mostró un stand perfectamente dosificado en el que la presencia de una buena parte de sus artistas no impidió disfrutar de sus obras con claridad. Heterogéneo fue también su planteamiento expositivo, en el que tuvieron cabida diversas disciplinas como el vídeo, la escultura, la pintura y la fotografía. Destacar entre todos ellos la presencia de dos leoneses: Isidro Tascón y Juanma Villanueva, que compartieron espacio con Txema Carbajo, el tándem compuesto por Leopoldo Ferrán y Agustina Otero, José Ferrero y Marta Serna, entre otros de los habituales de la galería. A esta última artista correspondió la obra presentada como «mascarada». Bajo el título de Máscaras de Fierabrás , nueve pequeños cuadros acaban formando un único conjunto formal y conceptual; nueve evocaciones del rostro que plantean un juego donde lo oculto se manifiesta bien a través de una máscara o bien a través del anonimato y no de la presencia explícita de la máscara en cualquiera de sus formas. Anular literalmente el rostro equivale a su presencia «mascarada», como si estar oculto en realidad apuntara a la imposibilidad de la presencia. La artista construye puentes entre estar oculto por máscaras y no existir, sólo transitables cuando aparece la mirada verdadera: ¿la del espectador? Ésta no ha sido la única presencia de leoneses en la feria. En el stand de la galería salmantina Benito Esteban, que ofrece soporte especialmente a artistas salmantinos y castellano-leoneses, pudimos disfrutar de obras de Santos Javier, Carlos Cuenllas y Juárez & Palmero; todos ellos artistas ya consolidados y con presencia habitual en ferias y exposiciones dentro del panorama nacional. En definitiva, estamos ante una apuesta muy interesante por ser la de Salamanca una feria con un planteamiento distinto que, con toda seguridad, le permitirá consolidarse dentro de la vorágine de ferias que afloran por todas partes.