Seat León Cupra, cada vez más...

Imagen y prestaciones. El nuevo Cupra, que Seat firma sobre la carrocería del León, se convierte en todo un «Súper GTI»... a precio asumible. Tan asumible, que el recién llegado puede presumir, a más de unas prestaciones de ensueño, de resultar más barato que la mayoría de sus enemigos naturales, entiéndase realizaciones como el Mégane Sport de Renault, el Golf R32, el Astra OPC, el Audi S3 o el BMW 130i. Seat parece haber conseguido la cuadratura del GTI; es decir, un auténtico deportivo que puede comportarse como el más normal de los familiares cuando el ocasional piloto vuelve a vestirse de conductor. Los 240 CV del Cupra, unidos a un cambio manual de 6 velocidades, y el tetracilíndrico TFSI (inyección directa de gasolina y turbocompresor) van camino de convertirse en toda una referencia histórica en los catálogos de la marca. Capaz de clavar el crono en 6,4 segundos cuando se trata de acelerar de cero a cien, de alcanzar una punta de 247 por hora y de no ir más allá de los 8,6 litros en consumo medio. Comparado con el FR gasolina de 200 caballos, se advierten en el motor de este Cupra ciertas diferencias que acaban siendo determinantes. El turbocompresor es aquí más grande, lo mismo que los inyectores (mayor caudal), el modificado diseño de la culata y el reforzamiento de bielas y pistones. Consecuencia: potencia a raudales y, lo mejor, perfectamente aprovechable. Imagínense lo que será -si es que llega... que puede ser- el Cupra R que, puestos a imaginar, hasta incluso podría montar el sugestivo cambio DSG que tan buenos resultados viene dando en otros modelos de la marca y que podría venirle de perlas al Cupra... sea R o no. El León Cupra continúa beneficiándose del ya conocido chasis ágil de Seat, sólo que en este caso los tarados de muelles y amortiguadores son todavía más firmes, primando la deportividad frente a la confortabilidad, aunque con un afinado compromiso entre ambos aspectos para que tampoco el coche presente un excesivo comportamiento tabla que, la mayoría de las veces solamente sirve para dar sensación de agarre y no tanto de auténtica realidad. Con una imagen llamativa, aunque sin estridencias, el nuevo Cupra presenta una evidente paralelismo estético con su hermano menor el FR: prominente boca frontal, apreciables aletines en los pasos de rueda, llantas de 18 pulgadas (neumáticos 225/40), sobredimensionados discos de freno con pinzas pintadas en rojo y una salida de escape ovalada. En el interior sí que se respira un auténtico ambiente racing : pedalier de aluminio, asientos baquet delanteros, volante multifunción de tres radios tapizado en piel y de aro grueso, relojes específicos en el cuadro de instrumentos; mientras el resto de mandos y la consola central, son idénticos a los utilizados en los demás modelos de la gama León. El maletero tiene una capacidad de 341 litros, bajo el plano de carga se aloja la rueda de repuesto, tipo galleta de emergencia, y el equipamiento comporta seis airbag, ABS, ESP, climatizador, ordenador de viaje y radio con CD y MP3. Así que... suspensiones firmes, frenos potentes y una dirección con tacto de carreras , convierten a nuestro protagonista en uno de esos coches que gusta conducir, con los que se disfruta al volante y que, por presencia estética y funcional, nos recuerdan poderosamente la filosofía deportiva que Seat viene imprimiendo últimamente a sus realizaciones.