SsangYong Rexton 270 Xdi, más y mejor

Cambios estéticos que propician una poderosa imagen, aumento de potencia en el motor diesel (186 CV), suspensión trasera independiente y un sistema de tracción total más efectivo. Con estos mimbres, SsangYong propone un nuevo Rexton II que supera con autoridad a su antecesor. Ya se sabe que en cuestión de gustos... por mucho que se escriba... Así que, los amantes de los grandotes están de enhorabuena. Los coreanos de SsangYong continúan manteniendo dos pilares para su «gama española»: el monovolumen Rodius y el todo camino Rexton, evolucionando ambos en progresión geométrica y paralelamente con sus ventas. Buena habitabilidad, un maletero panorámico (sobre todo en versión de cinco plazas, 600 euros la opción de la tercera fila de asientos para las 7 plazas) y un equipamiento ciertamente completo, son las cartas de presentación de renovado Rexton que, además, ofrece una veintena de caballos suplementarios en un motor diesel exclusivamente unido a un cambio automático secuencial de 5 velocidades (origen Mercedes) y con tracción total permanente en reparto 40/60, es decir, preponderancia sobre la propulsión trasera. Por cierto, con una «peculiaridad» -por no decir complicación- en el funcionamiento del modo secuencial: la palanca no se mueve por puntos»arriba/abajo» como suele ser habitual en este tipo de cajas de cambio, sino mediante una pequeña leva -»teclita»- situada en el lateral del pomo de la palanca, actuando con ligeros «toques» en la tal leva: hacia delante se suben marchas, hacia atrás se baja. También mediante un par de pequeños pulsadores en el volante, un tanto alejados de la posición natural de los pulgares. Así dicho, parece complicado, en la práctica... lo es más. Bueno, quizá no tanto; solamente hace falta un pequeño periodo de adaptación. En su descargo también hay que decir que el funcionamiento de la palanca, tanto en modo automático convencional como secuencial, es suave y preciso y, lo mejor, sin molestos saltos entre las distintas relaciones; solamente se pondrá de manifiesto un discreto resbalamiento del convertidor de par. En fin, nada que «moleste» especialmente. También conviene acostumbrarse a una dirección, bastante desmultiplicada y demasiado blandi en su tacto, lo mismo que a unos frenos no todo lo poderosos que deberían. SsangYong distingue ahora, perfectamente, entre la nueva motorización turbodiesel 186 CV y la ya conocida mecánica de 165 CV con la que el nuevo Rexton II continúa conviviendo: el nuevo 186 CV sólo con cambio automático y el 165 CV con caja manual. Los nuevos automáticos se ofrecen ahora con un también nuevo sistema de tracción total permanente AWD «40/60», que viene a sustituir al anterior TOD («Torque On Demand») y que seguirá montándose en las versiones manuales. Con unas prestaciones más que suficientes y unos consumos tan ajustados como que el Rexton II supera por muy poco los 9 litros como media lo que, para las dos toneladas de romana de nuestro protagonista, no resulta nada desproporcionado. La sonoridad mecánica, sobre todo en frío, quizá esté un punto por encima de lo deseable; mientras el fabricante apuesta por la confortabilidad, optando por unos tarados de suspensiones más bien blandos que, eso también, son capaces de absorber con autoridad las irregularidades del terreno -bien sea en asfalto o en tierra- lo que también se agradece, por mucho que los balanceos de la carrocería resulten ser el peaje a pagar por la confortabilidad. En sustitución del anterior eje rígido, la incorporación de una geometría independiente en el tren trasero, con ocho puntos de anclaje, ayuda mucho al buen comportamiento rutero del Rexton II. El equipamiento de serie incluye, entre otros elementos, el climatizador bizonal, control de descenso (muy útil en utilización off road ), elevalunas eléctricos en todas las ventanillas, doble airbag frontal (conductor y pasajero) y laterales, volante multifunción, retrovisores exteriores eléctricos. El acabado Limited incluye también la tapicería de piel, asientos con regulación eléctrica y calefactables, techo practicable eléctrico, puerto USB en el salpicadero para conectar MP3 o iPOD y ayuda sonora al aparcamiento. En suma, que el Rexton II gana enteros en su comportamiento dinámico, también en su lista de equipamiento y en la de ayudas a la conducción (ESP, TCS, sistema activo antivuelco ARP).