Fiat Bravo, llegará en primavera

Lo de Fiat con el Bravo, hermano mayor del Grande Punto y sustituto del Stilo, es como una historia de amor... en la recuperación de sensaciones: emblema de finales de los sesenta y redondeadas formas ya plasmadas en su añorado antecesor. Sólo en carrocería de cinco puertas, con un excelente maletero (400 litros), un correcto habitáculo y unas sugestivas motorizaciones, el «malagueño» Frank Stephenson ha modelado un nuevo Bravo que resulta ser una veintena de centímetros más grande que el Stilo de tres puertas y una decena más que el de cinco. Habida cuenta el protagonismo que su diseñador le ha concedido al morro, el Bravo no puede presumir de un panorámico habitáculo, lo que no impide disponer de un acceso muy cómodo y una sorprendente altura de techo, lo que no viene sino a confirmar que, en los últimos tiempos, la filosofía monovolumen -aunque el Bravo no lo sea, ni tenga porqué- está bien presente en los diseños de última hornada. Apuntar también que el Bravo, aún manteniendo la batalla del Stilo, incrementa sensiblemente sus vías (20 milímetros más- con, además, un generoso equipo de rodaje (llantas de 15 pulgadas en las versiones básicas y de 16 y hasta en las motorizaciones superiores) con lo que, como el lector ya habrá colegido, su comportamiento dinámico gana varios enteros. También la rigidez estructural y los tarados de suspensiones, sin penalizar la confortabilidad, influyen positivamente en el comportamiento rutero. En su primera fase de lanzamiento, el Bravo contará con un par de mecánicas diesel de probada solvencia en los catálogos de Fiat, el Multijet de rampa común que cubica 1.9 litros y que se declina en potencias de 120 y 150 CV. El apartado de gasolina viene representado por el 1.4 litros multiválvulas de 90 CV, así como una nueva generación turboalimentada T-Jet: 1.4 Turbo de 120 y 150 CV, que combinan emisiones y consumos reducidos, amén de remarcables prestaciones. Estas nuevas motorizaciones, desarrolladas por Fiat Powertrain, estarán disponibles en el mercado español poco después del lanzamiento del Bravo: el 1.4 Turbo de 150 CV llegará en mayo, sólo un mes después del lanzamiento comercial del nuevo modelo y el 1.4 Turbo de 120 CV desembarcará en los concesionarios el próximo otoño. Se venderá de serie con un kit para la reparación de pinchazos y, opcionalmente, se ofrecerá una rueda de repuesto de emergencia y hasta incluso una de tamaño normal. El nuevo Fiat Bravo ha sido diseñado para obtener la máxima puntuación en las pruebas de seguridad pasiva y activa, gracias a la adopción de numerosos airbag (hasta 7), de cinturones de tres puntos con pretensores y limitadores de carga y de cinco reposacabezas. También el llamado «impacto peatón» ha sido especialmente cuidado, de forma que el vehículo cuenta con un bastidor portante, concebido para maximizar la absorción de este tipo de colisiones y, por tanto, para que el peatón, en caso de atropello, resulte lo menos lesionado posible. También se han adoptado los más modernos sistemas electrónicos de ayuda a la conducción, como es el caso de los frenos con ABS y frenada de emergencia EBD, el sofisticado ESP con «Hill Holder» y el sistema antideslizamiento ASR. Eso, por no hablar de otros aditamentos más «lúdicos», como es el caso del equipo de sonido con MP3, el sistema «Blue&Me» (manos libres con reconocimiento de voz, USB y SMS), servicios telemáticos como el SOS y otros servicios de seguros. Y el emblema... La renovación de la gama de productos Fiat coincide con la implantación del emblema de identidad corporativa creado por RobilantAssociati, agencia especializada en asesores de marca) en colaboración con el Centro Stile Fiat, el nuevo emblema se inspira en el utilizado por el fabricante entre 1931 y 1968: fondo rojo rubí y caracteres «FIAT» alargados verticalmente. Todo el conjunto se engarza en el interior de un marco redondo y cromado, con efecto tridimensional. Este emblema, que ahora se estrena en el Bravo, se adoptará paulatinamente en todos los modelos de Fiat.