Diario de León

«Lo decisivo es la familia y la educación infantil»

Ángel Suárez | El director de la Escuela de Adultos de León critica que las empresas pidan títulos que no tienen que ver con el trabajo

NORBERTO

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CARMEN TAPIA | texto
León

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- «¿Qué ha provocado que estos alumnos fracasen en los institutos? -Esa es la pregunta del millón. El fracaso escolar es una patata caliente que es lo suficientemente abstracta para que nadie se sienta implicado. ¿Quién fracasa, la familia, el sistema educativo, el profesorado, la sociedad o todos?. El fracaso escolar a veces tiene poco que ver con los suspensos, es más. Los suspensos nos dicen que algo no está funcionando, pero a veces existe un fracaso escolar detrás de unas buenas notas. -¿Como se mediría entonces? -El sistema educativo no se puede medir en base a éxitos o fracasos porque sería caer en una trampa. Hay que procurar imprimir sentido común a la enseñanza. Los niveles que son decisivos están en Educación Infantil y primaria, aunque lo más decisivo es la familia. El fracaso es cualquier distancia que exista entre la escuela ideal y la realidad. Los suspensos miden, no son desdeñables, pero no valoran todo lo que es el fracaso escolar. Por ejemplo. Un chico termina la ESO y saca en lengua un notable, el padre le manda que escriba una solicitud al ayuntamiento para cualquier reclamación, y este chico que tiene notable en lengua por analizar oraciones subordinadas sustantivas de complemento directo, no es capaz de escribirlo, es incapaz. ¿qué pasa ahí? La escuela ha fracasado por mucha subordinada que sepa, porque no sabe redactar un escrito con orden para dirigirse a una autoridad. Otro caso es el de aquellos que saben ecuaciones de segundo grado con dos incógnitas, pero no saben si les han cobrado de manera correcta una pescadilla de 600 gramos sabiendo que el kilo estaba a 18,50 euros. ¿Hemos sido eficaces? No es un fracaso sacar chicos con diez años de escolaridad obligatoria que no leen ni la prensa deportiva . -¿Cómo intentan solucionar esos problemas en este centro? -Lo que intento decir es que a veces un suspenso no mide nada. Yo dediqué años a estudiar el fracaso escolar. Habría que analizar qué se hace en la familia, los objetivos que se trazan en la escuela y en los institutos, si distinguimos lo que es básico de lo que es accidental, porque todo no es igual de importante. Los ritmos de maduración de los niños son distintos, sin que la pera que madura primero sea mejor que la que madura más tarde. No hacer una enseñanza individualizada es un problema. -¿Qué papel tiene la familia? -¿En la familia se lee o se ve la tele?. Los niños actúan por imitación. En una casa donde hay momentos para trabajos intelectuales, como jugar a la baraja, donde se lee, los niños tienden a imitar. Hoy se le pide a la escuela que sea eficaz con todos los alumnos y con más años de enseñanza obligatoria. Yo mantengo que hay chicos normales, que van a labrarse un provenir y ganarse su sustento en la vida que jamás serán capaces de hacer una derivada integral ni un comentario de texto literario. -¿Pero hay que tener en cuenta la presión del mercado de trabajo? -Eso es otro tema. ¿Por qué el mercado de trabajo pide lo que no debe pedir?. Para ser barrendero piden el graduado en secundario. ¡No!. Para ser barrendero hay que barrer mejor que nadie y a ser posible facilitar a ese futuro barrendero , a que consiga la formación básica en centros como el nuestro. El mercado de trabajo se inmiscuye de manera poco ética exigiendo requisitos que nada tienen que ver con la función para las que se les llama. Sería deseable, pero un bombero puede ser un excepcional bombero y no tener el graduado escolar.

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