Recogidas 75.000 Tm. de envases ligeros, papel y cartón

Según los datos que maneja la Consejería de Medio Ambiente, durante el año 2006 se depositaron en los contenedores repartidos por Castilla y León un total de 75.000 toneladas de residuos de envases ligeros y de papel-cartón, cantidad equivalente a llenar seis estadios de fútbol. De esa cantidad, se reciclaron más de 46.000 toneladas. Los residuos depositados en los contenedores amarillos y azules suponen al año 29,3 kilogramos por habitante y año, cifra que supera en un 6% la media nacional. Al finalizar el pasado año, la recogida selectiva de envases ligeros (de plástico, latas, briks), supuso una media de 7,8 kilos por habitante y año (un 32% más que el año anterior), cifra equiparable a la media española. Respecto al papel y cartón, se recogieron 21,5 kilos por habitante y año, un 9% más que la media nacional. Además, desde el inicio de la recogida selectiva de envases ligeros, Castilla y León ha destacado por la calidad de los materiales llevados a los contenedores amarillos, con una media de impropios (materiales incorrectamente depositados) de sólo un 27%. En la actualidad, el 83% de los castellanos y leoneses dispone de contenedores azules para depositar cartón y papel, y el 73% cuenta en sus municipios con servicio de recogida selectiva para la recuperación de envases ligeros. Colaboración ciudadana Con el fin de seguir promocionando y fomentando este tipo de recogida selectiva, el consejero de Medio Ambiente, Carlos Fernández Carriedo, y el director general de Ecoembes, Melchor Ordóñez, han firmado un convenio en el que se contempla el desarrollo de actuaciones de colaboración y apoyo a las entidades locales, estudios de optimización de la gestión, proyectos de I+D, acciones divulgativas e informativas, así como actuaciones de comunicación. Según afirmó el consejero, «con este acuerdo, que tiene vigencia hasta mayo del próximo año, se quiere conseguir una recogida de calidad de envases ligeros y de papel-cartón e incrementar los niveles de reciclaje, teniendo en cuenta las condiciones específicas de Castilla y León en cuanto a la tipología de los municipios y la dispersión de la población». Se pretende, además, mejorar la cantidad y la calidad de la recogida selectiva, lo que permitirá aumentar los rendimientos de las 11 plantas de clasificación de envases existentes en nuestra comunidad (el 12% de las que hay en España), e incrementar los niveles de reciclado. Melchor Ordóñez, por su parte, señaló que, «gracias al esfuerzo de todos los ciudadanos, Castilla y León supera la media nacional en cuanto al reciclaje de envases. Estamos seguros de que las cantidades recogidas alcanzarán, gracias a la colaboración de todos, cifras superiores a las actuales gracias a este nuevo acuerdo». Añadió, además, que «si los ayuntamientos siguen poniendo las infraestructuras de contenedores necesarias, la industria y el comercio garantizarán que esta recogida y reciclado se puedan financiar». Una de las primeras iniciativas puestas en marcha gracias al convenio es la campaña de sensibilización «Dale una nueva vida a los envases» que se emite en los principales medios de comunicación de Castilla y León desde el pasado 1 de marzo, y en la que se invertirán cerca de 350.000 euros. Se trata de una grafía animada que muestra a los propios envases explicando los beneficios de su reciclado e informa cómo separando correctamente los diferentes tipos de envases se les puede dar «una nueva vida». Así, por ejemplo, del reciclado de 80 latas de refresco se puede obtener una llanta de bicicleta; de 6 briks, una caja de zapatos; de 40 botellas de plástico un forro polar, o de 8 cajas de cereales se pueden editar las páginas de un libro. Fernández Carriedo explicó que en el año 2006 Castilla y León contaba con cerca de 12.000 contenedores, uno por cada 216 habitantes, de los que 6.630 eran de papel-cartón y, el resto, de envases ligeros. Además, hay 605 empresas adheridas al Sistema Integrado de Gestión de Ecoembes, lo que sitúa a la comunidad en el sexto lugar de España.