Herencia deportiva...
|||| Más de cien años de herencia deportiva. La actual Audi atesora en su haber la historia de aquellos míticos Auto Unión que, entre los años 1934 y 39, lograron 42 victorias en 83 Grandes Premios... mucho antes de la instauración del Campeonato del Mundo F1 tal como hoy lo conocemos. Eso, por no hablar de los aplastantes triunfos cosechados por la marca de los cuatro aros en el Mundial de Rallys, especialidad que revolucionara Audi con la introducción del sistema de tracción Quattro. También las seis victorias en las 24 Horas de Le Mans o en el campeonato mundial de Turismos (DTM). Pocos términos han alcanzado connotaciones tan positivas como el de Quattro que, pasadas ya más de dos décadas desde su instauración, sigue conservando todo el encanto y la practicidad técnica en algunas de las más fascinantes realizaciones del fabricante. Dentro de Audi AG, la división «Quattro GmbH constituye un ente autónomo, dedicado a desarrollar soluciones vanguardistas en el campo de la tracción 4x4 aplicada a turismos de serie. En 1980 aparecía el primer Audi Quattro y tres años después (1983) «Quattro GmbH» alcanzaba la consideración de división independiente en Audi, un departamento dotado de plena operatividad y orientado al desarrollo de productos tecnológicamente avanzados. Al día de hoy, la división «Quattro» es capaz de desarrollar infinidad de soluciones estéticos-prácticas, desde la creación de una gama de colores de carrocería específicos, hasta versiones exclusivas a partir de los modelos de estricta serie, como es el caso de las dos generaciones RS4 y RS6, pasando por la gama S, que incluye los S3, S4, S6 y S8 en sus diferentes carrocerías, además de la configuración de paquetes opcionales S Line y un largo etcétera de elementos diferenciadores, cuyas actividades de producción y desarrollo se localizan en Neckarsulm, mientras todos los demás aspectos relaciones con ventas y marketing siguen centrados en la casa matriz de Ingolstadt. Uno de los Audi más legendarios de la era moderna, el S1 de rallyes de 1985, dio nombre, en 1991, al primer Audi S de calle, el Coupé S2 (tracción Quattro) que, posteriormente, daría origen a otros modelos de la saga -S3, S4, S6- hasta llegar incluso al buque insignia S8, una «arriesgada» -en lo comercial- combinación de lujo y refinamiento mecánico que dio como resultado una cuota del 11% del total de ventas en 1996, año de lanzamiento de su primera versión. Actualmente, el Audi S8 ha superado el listón de las 140.000 unidades vendidas... a 107.900 euros «la pieza», con el motor V10 FSI de 5.2 litros y 450 CV dotado -¡cómo no!- de tracción Quattro. La declinación más exclusivamente deportiva de la serie S son las versiones RS. El RS2 Avant, basado en el Audi 80 Avant, rompió el fuego (1992) de las altas prestaciones: motor turbo de cinco cilindros y 315 CV, que en su primer año de comercialización alcanzó las 2.881 unidades vendidas. La segunda propuesta RS, y primera de «Quattro GmbH» como división independiente, sería el RS4 de 1999 que se mantuvo en producción durante catorce meses y cuya versión Avant superaría las 6.000 matriculaciones. También con el RS6 (480 CV) se mantendría la política de las dos carrocerías, Berlina y Avant. El nuevo RS4 (82.200 euros) es la última creación de las «versiones especiales» en Audi, dotado con el motor V8 FSI (inyección directa de gasolina), tracción Quattro y 420 CV, que cuenta con versiones Berlina, Avant y Cabrio: 4,8 segundos de cero a cien; 16,6 de cero a doscientos y una punta (autolimitada) de 250 por hora.