GESTIÓN
Reciclado, valorización y reutilización
Sigfito se creó el año 2002 como una iniciativa del sector fabricante de productos fitosanitarios para dar respuesta a las obligaciones que para estas empresas, y para el conjunto del sector agrario, suponía la nueva legislación sobre este tipo de envases. Obtiene su financiación de las 95 empresas del sector adheridas al sistema, que pagan en función de los envases que ponen anualmente en el mercado y, mediante la comercialización de los productos, el coste queda repartido a través de la cadena de venta (fabricante/envasador, distribuidor, consumidor/agricultor). El destino prioritario es la transformación de los residuos en materias primas válidas para procesos de producción posteriores, tales como granza de plástico con la que fabricar cualquier objeto de plástico nuevo (salvo destinados a alimentación, higiene o juguetes) o fundición en el caso del metal. Como forma secundaria se utiliza la valorización energética, es decir, la obtención de energía eléctrica a través de instalaciones específicas. La reutilización se emplea sólo para los grandes bidones y tras un proceso de lavado, que pueden volverse a utilizar como nuevo continente de producto fitosanitario. Un último destino es el almacenamiento en depósito de seguridad donde permanecen controlados los residuos.