Jeep Wrangler, motores diesel y dos carrocerías

Complejos fuera. Ya no hay excusas. El todoterreno por excelencia, el Jeep Wrangler ya puede presumir de haberse sacudido el sambenito que lo acompañaba desde «la noche de los tiempos»: la gama cuenta, desde ahora, con una versión diesel (177 CV) que le permitirá codearse, y ponérselo difícil -más si cabe- a sus enemigos naturales. Si los eficaces motores de cuatro y seis cilindros gasolina conformaban, hasta ahora, la oferta del Wrangler, su utilización habitual retraía -por evidentes condicionamientos crematísticos- su demanda. La llegada del gasóleo y de la carrocería de cuatro puertas, puede suponer una gloriosa segunda -tercera o cuarta...- juventud para el legendario heredero del mítico Willys. Eso, por no hablar de la «revisión filosófica» que el fabricante ha puesto en práctica con esta nueva generación del modelo: mayor eficacia off road , más utilizable en carretera, mayor espacio interior -incluso en la versión de dos puertas-, seguridad revisada al alza y un equipamiento comparable a los todocamino de última hornada. Eso sí, los incondicionales pueden estar bien tranquilos, el Wrangler ni ha perdido su condición de TT «extremo» ni tampoco algunos de los peajes a pagar por esa condición, entendiendo por tales el eje rígido en ambos trenes (rebotes sobre piso deteriorado) o su elevado peso que le lleva, como fácilmente puede suponerse, a unas cifras de consumo un tanto más elevadas de lo que sería deseable, incluso con la nueva mecánica diesel. La tal implantación tetracilíndrica de gasóleo es una evolución del que se viene montando en el Cherokee y Grand Cherokee (VM Motori), dotado de una nueva gestión electrónica que es la que le permite alcanzar los 177 CV y, por ende, mover con autoridad el par de toneladas de peso que da en báscula el renovado Wrangler. Los 180 autolimitados por hora y 8,3 segundos en aceleración de cero a cien, no son malas cartas de presentación para un modelo que, además de la abultada romana , no se caracteriza precisamente por una aerodinámica especialmente cuidada. Apuntar, para los amantes de las curiosidades estadísticas, que se trata del mismo motor estrenado en el reciente Dodge Nitro; es decir, inyección directa por rampa común, culata multiválvulas y filtro de partículas, cuyo peso es un 20% más bajo que el de la versión de 163 CV con, además, unos kilometrajes de mantenimiento más dilatados (140.000 Km. para la correa de distribución) y unos consumos prácticamente idénticos. Eso, por no hablar de un mayor refinamiento en sonoridad y vibraciones, lo que siempre es de agradecer. Con 53 centímetros suplementarios -en longitud- y una batalla aumentada en 52 centímetros, la carrocería de cuatro puertas Wrangler Unlimited tiene capacidad para cinco ocupantes (cuatro en el de dos puertas) y ofrece una mayor versatilidad sin pérdida apreciable de encanto estético. Existen pequeñas diferencias de homologación del Wrangler «europeo» respecto a su hermano yankee , como es el caso del más prominente parachoques parachoques delantero, faros antiniebla colocados en los extremos en lugar de centrales, placa de matrícula trasera bajo la rueda de repuesto (menor ángulo de salida en vadeo), el Wrangler sigue conservando alguna de sus tradicionales peculiaridades: arco de seguridad de seis puntos, homologación para circular sin puertas, mandos interiores y tapicería preparados para la lluvia o la posibilidad de retirar por partes la capota rígida amén, ¡sólo faltaba!, de la posibilidad de abatir el parabrisas. En el capítulo de seguridad y ayudas a la conducción, los nuevos Wrangler disponen de control de estabilidad ESP (con tres programas para utilización todoterreno), corrector de situaciones de vuelco y airbag frontales y laterales. La renovada gama Wranlger, que se estructura en torno a cuatro acabados (Sport, Sport+, Shara y Rubicon) cuenta con once versiones, siete de dos puertas y cuatro con la nueva configuración de cuatro puertas y cinco plazas, con unas tarifas que arrancan en 27.290 euros y que llegan hasta los 36.800 euros de la versión más alta, el 3.8 litros V6 (gasolina) de 200 CV.