Cerrar

Galicia, con más medios que nunca, no se fía del fuego

Las llamas han respetado hasta ahora los montes gallegos, pero la alerta es máxima a pesar de que el mes de julio fue muy lluvioso, después de que el año pasado ardieran más de 77.000 hectáreas de terreno en doce días de agosto

Publicado por
ERNESTO PÉREZ | texto
León

Creado:

Actualizado:

Galicia está, cuando se ha cumplido un año después de la devastadora oleada de incendios de 2006, mejor preparada para hacer frente al fuego, lo que no resta prudencia a la Xunta en sus predicciones para lo que queda de verano, ya que no se fía siquiera de la lluvia que el pasado julio empapaba el suelo. Más de 77.000 hectáreas de terreno quemadas en doce días de agosto de 2006, de vientos fuertes y con cien nuevos fuegos cada día, sembraron en Galicia una polémica política y ecológica que se prolonga hasta hoy. En su despacho de la Consellería de Medio Rural, su titular, el nacionalista Alfredo Suárez Canal, dijo, en declaraciones a la Agencia Efe, que está, 365 días después, nuevamente de guardia, permanentemente en contacto con sus colaboradores y observando cada rato en su ordenador el mapa de riegos. Julio ha sido lluvioso y las llamas han respetado hasta ahora los montes gallegos, pero el conselleiro no quiere aventurarse ni mostrar optimismo. Los técnicos le apuntan que este mes, en que ha empezado ya a hacer calor, se prevé meteorológicamente «normal» pero aún así no quiere bajar la guardia. El principal temor de los expertos en la lucha contra el fuego es la confluencia de un fuerte viento unido a elevadas temperaturas, casualidad que a medio plazo no pueden diagnosticar ni los sofisticados medios con que hoy cuenta Galicia para predecir los riesgos. No obstante, Suárez Canal opina que la Comunidad está mucho mejor preparada para luchar contra el fuego, porque se han hecho trabajos de limpieza y se cuenta con más medios materiales y humanos y se ha dado rango de ley a la lucha contra el fuego. Pero advierte también de que muchas de las medidas que la administración ha tomado en el último año buscan cambios estructurales, que suelen ser «lentos» porque se refieren a la propia ordenación forestal. En todo caso, destaca que la lucha contra el fuego y las tareas de vigilancia y prevención contarán este año con unas 6.000 personas, lo que, unido a la presencia de fuerzas de seguridad en los montes y a otros efectivos, hace que más de 10.000 estén dispuestas a hacer frente a los incendios si se presentase un momento «complicado». Desde la Xunta también se confía en que en este aniversario del desastre de agosto de 2006 se lleguen a curar las heridas ecológicas y políticas que causó el fuego en los montes gallegos y se deje de un lado la política partidista en esta materia. Pero el asunto sigue politizado y se mantienen las críticas del PP a la gestión de la administración gallega. De hecho, el líder gallego, Alberto Núñez Feijóo, reitera su postura de que la Xunta «no ha aprendido la lección» de la ola de incendios del verano pasado y «no ha hecho tareas ni de prevención ni de reforestación ni de limpieza» de los montes. A su juicio, el Gobierno gallego actuó hace ahora un año en función de planteamientos ideológicos como creer inicialmente que el Ejército «no era necesario o que era mas importante el conocimiento administrativo del gallego que la experiencia de extinción de incendios» en la contratación de personal. Lo mismo piensan varios alcaldes de los ayuntamientos afectados por los incendios del verano pasado, mayoritariamente del PP, que insisten en que el monte «no está limpio» de maleza, lo que los hace más vulnerables a la propagación de eventuales fuegos.

Cargando contenidos...