Los gemelos Kaczyneski, un dúo implacable

|||| Tozudos, nacionalistas y a menudo paranoicos, los gemelos Kaczynski han convulsionado Polonia y, tras dos años en el gobierno, se han visto obligados a convocar elecciones anticipadas que pueden poner en peligro su estabilidad en el poder. Lech, el presidente, y Jaroslaw, el primer ministro polaco, se han ganado a pulso la animadversión de los líderes europeos, de la propia derecha polaca y de millones de sus compatriotas, que quizás no vuelvan a votar por ellos en los comicios del 21 de octubre, dos años antes del final de la legislatura. «No sean ustedes bobos; es mucho mejor tomar el sol sentado en algún jardín», decía uno de los miles de mensajes de ciudadanos descontentos que recibieron el 18 de junio, día de su 58 cumpleaños. El anónimo consejo simboliza el desencanto de ese rigor puritano contra la corrupción y los vestigios del comunismo con el que los dos ex líderes del sindicato Solidaridad sedujeron a sus compatriotas hace dos años. «No supieron probar que saben gobernar. El gobierno estalló, es el caos, incluso en las filas de su partido», resumió Lena Kolarska Bobinska, directora del Instituto de Asuntos Públicos. Tras dos años en el gran escenario político del Estado, se han desembarazado de todo aquel -tanto rival progresista como aliado conservador- con algún peso político y han preferido elegir simples «marionetas» para ejecutar sus órdenes co nmano dura.