Jaguar XF, innovador y vanguardista

Estética innovadora y vanguardista interiorismo. Jaguar lanza un órdago al particular segmento de las berlinas deportivas con el preciosista XF, un modelo que llega en un momento crucial para la marca del Gran Gato que, junto con Land Rover, acaba de abandonar la órbita de Ford, adquirida por Tata. Así que, el XF puede marcar un antes y un después en la marcha de la compañía. Sea como fuere, el caso es que el novedoso XF aporta un soplo de aire fresco a un segmento dominado por las propuestas germanas (A6, BMW 5, Mercedes C) que agradecerán quienes pretendan un coche distinto. Es verdad que el XF reinterpreta el estilo clásico de Jaguar, aunque con unas pinceladas características (nueva parrilla frontal, capó nervado, faros encapsulados, techo perfilado...) y un interiorismo con toda la tradición y elegancia de las berlinas inglesas, deportivamente personalizado con la inclusión de terminaciones de aluminio que comparten espacio interior con la madera y el cuero. Más grande que el S-Type al que viene a sustituir, el XF mide 4,96 metros, lo que supone un incremento de 6 centímetros respecto al S-Type (otros 6 de ancho y un par de ellos en altura). La consecuencia es un habitáculo correcto, quizá con tan amplio como cabría esperar, aunque con una también ampliada capacidad del maletero hasta los 500 litros (923 si se pliegan los respaldos traseros). Jaguar tampoco se ha parado en barras a la hora de proponer curiosidades de funcionamiento interior, desde las luces que se encienden al tocarlas o la llave inteligente, que abre las puertas sin sacarla del bolsillo, la palma se la lleva el botón de arranque parpadeante... al pulsarlo se abren las rejillas de refrigeración y «emerge», a modo de saludo, el mando cilíndrico del cambio automático secuencial. Tal parece que el coche tuviese vida propia... y puede que la tenga. El capítulo mecánico está representado por cuatro posibilidades, tres de gasolina y un biturbodiesel, todos ellos unidos a un cambio automático secuencial de 6 velocidades, con mandos en el volante: 3.0 V6 (238 CV); 4.2 V8 (298 CV) y 4.2 V8 Turbo (416 CV) en gasolina y el 2.7D biturbo (207 CV) en diesel. En suma, que el Jaguar XF se convierte en una sugerente alternativa a las berlinas alemanas, para quien pretenda un coche tan atractivo como «menos» visto.