El uso del transporte público en España alcanza el 30%

España presenta unos porcentajes elevados de uso del transporte público (30%), superiores a la media europea (21%) y más que países como Italia (18%), Reino Unido (17%), Francia (16%) y Alemania (15%). Así se indica en el informe "Libro Verde sobre transporte urbano", correspondiente al año 2008, elaborado por el Observatorio de la Movilidad Metropolitana (OMM). En el texto se destaca que el uso del transporte público y de los viajes a pie que se realizan en España es similar a los porcentajes de países europeos con menores índices de motorización como Rumania o Bulgaria. Se indica, además, que aunque el porcentaje de viajes a pie en España sea de los más elevados dentro de los países de su entorno, los viajes en bicicleta son casi nulos, menores al 5%, a diferencia de Alemania, donde se alcanza un 16%. En el documento se recogen datos de los indicadores de movilidad correspondientes al año 2006 y a las áreas de Alicante, Asturias, Barcelona, Bahía de Cádiz, Gran Canaria, Granada, La Coruña, Madrid, Málaga, Pamplona, Sevilla, Campo de Tarragona, Valencia, Vigo, Vizcaya y Zaragoza, que congregan a 23,5 millones de personas, el 52,6% de la población española, por lo que se tiene, a través del estudio, una imagen bastante aproximada de la situación de la movilidad en España. Turismos y motos La ciudad principal cobra mucha importancia en cuanto a concentración de población se refiere, ya que en la mayoría de las áreas supera el 50% del total de población del área. En un extremo está Zaragoza, con el 89%, mientras que Cádiz tan sólo alberga un 20% de la población del área de Bahía de Cádiz. El índice de motorización es mayor en Madrid, con 500 turismos por cada mil habitantes, y en último lugar está Zaragoza con 359. Destaca el elevado número de motos y ciclomotores que presentan, especialmente las ciudades de Granada y Cádiz, con 160 y 139 por cada mil habitantes, respectivamente. El vehículo privado es el modo dominante en la mayoría de las áreas para realizar los desplazamientos (32-53%), siendo la marcha a pie el segundo en importancia (30-45%), especialmente en ciudades pequeñas y medianas. Para desplazamientos por motivo de trabajo, el coche es aún más dominante, siendo más usado en áreas pequeñas y medianas (mayor del 60%), mientras que en las grandes (Madrid, Barcelona) este porcentaje no supera el 45%, siendo el uso del transporte público más elevado que en resto de las áreas (40% en Madrid y 24% en Barcelona). En cambio, para desplazamientos por motivos distintos del trabajo (ocio, compras, visitas) es la marcha a pie la que tiene mayor peso (40-50%), y en las grandes áreas también tienen mucha importancia los viajes en transporte público (25-30%). Para las áreas analizadas, se ha producido un crecimiento neto de los viajes en transporte público (un 8,9%), siendo mayor el aumento de los viajes en modos ferroviarios (15,4%) que el crecimiento de los viajes en autobús (2,2%). En cuanto a viajeros-kilómetro se refiere, su evolución entre 2003 y 2006 en cinco áreas metropolitanas es de un crecimiento del 18,2%, siendo mayor en modos ferroviarios (25,3%) que en autobuses (4,5%), crecimiento que viene justificado, en parte, por el aumento de la oferta. Así, en casi todas las áreas el incremento en los modos ferroviarios ha sido superior al aumento en los autobuses, a excepción de Barcelona, cuya densidad de oferta de autobuses tanto por habitante como por superficie es superior a la de los modos ferroviarios. Aunque la cuota de demanda es muy similar, la longitud de las redes es muy diferente: 20.250 kilómetros de autobuses y 2.714 ferroviaria (urbana y metropolitana), lo que significa que las redes ferroviarias soportan una mayor cantidad de viajes que las de autobuses. Lo mismo pasa en los viajes realizados en autobús urbano y en metro y tranvía: 1.148 millones de viajes en autobús urbano frente a 1.179 millones en metro y tranvía. La media de viajes por habitante y año en transporte público es de 118, variando de 270 en Madrid y 67 en Málaga.