Diario de León

Urueña:Villa del Libro y del buen comer

La muralla medieval de este pequeño pueblo vallisoletano esconde un emporio de cultura en la que tienen mucho que ver varios personajes leoneses

CUEVAS

CUEVAS

Publicado por
MARCELINO CUEVAS | texto
León

Creado:

Actualizado:

Urueña es una pintoresca villa situada en el extremo oriental de la Tierra de Campos, allí donde el terreno se alza en las suaves y blancas elevaciones de los montes Torozos. Mira los mares de mieses sin sumergirse en su dorada superficie, lo mismo que en el occidente terracampino sucede con la localidad leonesa de Sahagún. Una imponente muralla medieval guarda su caserío desde hace cientos de años. Cuentan que los origines de Urueña se pierden en la noche de los tiempos y que a lo largo de la historia su situación fronteriza la ha llevado a pertenecer alternativamente a Castilla, a León e, incluso al más lejano Reino de Aragón. El último en contar las historias, las coordenadas geográficas y el arte que sus albas murallas esconden es un escritor y fotógrafo leonés, primer personaje de esta tierra que aparece en un relato en el que tendrán protagonismo varios más. Ricardo Puente es el autor del libro Urueña, balcón de Tierra de Campos. «Cuando me hablaron de Urueña, hace ya varios años, no era tan conocida como ahora -comenta- hice un viaje y me pareció un lugar de ensueño rodeada de grandes atractivos, como una iglesia comparable a la nuestra de San Miguel de Escalada, San Cebrián de Mazote, un estupendo monasterio cisterciense llamado de La Espina, y el propio núcleo del pueblo. Hice unas publicaciones sobre estos tres sitios. Pasando el tiempo Urueña ha crecido en interés al convertirse en Villa del Libro , y por eso he publicado la nueva edición del libro». El polifacético Ricardo Puente ha mirado la villa desde todos los sentidos. «Aunque el paisaje de Tierra de Campos puede parecer en algunos momentos árido y monótono, para un fotógrafo tiene extraordinario interés. Esas llanuras de cereal que van cambiando de color con el correr de las estaciones, la riqueza de los monumentos ubicados en la comarca¿ creo que son fuentes inagotables para un fotógrafo. Por otra parte, desde el punto de vista del escritor, del historiador, es también una zona muy interesante ya que tiene una riqueza histórica enorme, sobre todo si nos ceñimos a los tiempos de la Edad Media. Hay que darse cuenta de que Urueña, aunque en este momento esté enclavada en la provincia de Valladolid, es un territorio fronterizo y por lo tanto sufrió grandes avatares en todos los sentidos». Las murallas atesoran libros Urueña se moría de puro hermosa, agonizaba en silencio. Los palomares que miran con asombro sus altivas murallas, sentían que con el tiempo la vida abandonaba las viejas piedras. Pero un buen día, hace dieciocho años, Joaquín Díaz, famoso cantante que cambió el éxito y la popularidad por el estudio serio del folklore en todas sus facetas, decidió crear una fundación en una de sus historiadas casonas, fundación que se convirtió en la locomotora cultural que consiguió devolver la vida al pueblo. Hoy, además de ser aula de estudio y centro de reunión de folkloristas de todo el mundo, también acoge un espléndido museo de instrumentos musicales, y en otro edificio presenta un singular museo de campanas y, también, la mejor colección de pliegos de cordel de cuantas existen en España. Con la puesta en marcha de la idea pareció en Urueña su primer librero, Jesús Acarabán. «Yo vine hace dieciséis años -comenta- fue la mía la primera librería que se instaló en Urueña, y hasta que la hicieron Villa del Libro, era el pueblo más pequeño de España con librería. Me siguieron un encuadernador, un taller de diseño gráfico¿ todo un poco relacionado con la cultura popular y la música. Mi librería está especializa el libros de Castilla y León, especialmente de folklore y música». Presidente de los libreros Es leonés, se llama Felipe Martínez Prieto, y desde hace algún tiempo es Presidente de la Asociación de Libreros de Viejo y Antiguo de Castilla Y León, y ha tenido mucho que ver con el desarrollo de la Villa de Libro en Urueña. «La Diputación de Valladolid -explica- he suscrito un convenio con nuestra Asociación en el que nos hemos comprometido a mantener una tienda colectiva y a colaborar en la difusión de las actividades en el pueblo. El proyecto, que ya ha cumplido su primer año de vida, es una gran idea que necesita tiempo para decantarse. Hay cosas mejorables y quizá lo que más se hecha en falta es un espacio polivalente para actividades culturales y una mayor promoción, aunque la Diputación ha hecho grandes esfuerzos, no es bastante». Cree Felipe Martínez que la promoción del libro y de la lectura que se promueve desde aquí es lo mejor que se ha hecho en muchos años a nivel nacional. «En los tiempos que corren -dice- en el que los niños ni siquiera adquieren el hábito de leer, es muy meritorio aventurarse en un proyecto cuyo principal valor es el cultural. Como es lógico la Diputación tiene también otros objetivos que en ningún caso son incompatibles, al contrario, la promoción de la provincia, de la comarca y del turismo, son perfectamente compatibles con el empeño cultural de la Villa del Libro y las actividades de la Fundación de Manolo Díaz. En este momento puedo asegurar que la aventura es un éxito». Urueña vive momentos de remodelación, de calles que se renuevan, de casas semi derruidas que ven rehacerse sus paredes, y esto puede ser un freno para la actividad cultural. «Sí, las obras no dejan de ser un inconveniente, agravado porque Urueña es un pueblo de calles muy estrellas y prácticamente creado dentro de los límites de la muralla. A las librerías, a quines les han tocado las obras prácticamente han tenido que cerrar durante un tiempo. Aunque está afectando más, como ocurre en todas partes, la situación económica general. Ahora que cualquier tipo de comercio ha sufrido bajas notables, los libros son uno de los sectores más afectados, ya que son de lo más prescindible, o al menos algunos lo piensan así». En Urueña actualmente hay tres librerías de viejo, y ninguna de ellas se puede considerar de libro antiguo, y también existen cinco de libro nuevo, una especializada en temas infantiles y otra en música y temas folklóricos. «Obviamente -dice Martínez- la oferta bibliográfica debería ser más amplia y con menos proporción de libro nuevo y más de libros antiguos».

tracking