La reina del picoteo es rubia y fresquita
Refrescarse con la milenaria y espumosa cerveza es un hábito irrenunciable para la inmensa mayoría de los españoles. El 15% de toda la cerveza que consumimos, 57 litros por habitante y año, carece de alcohol
El del aperitivo de uno de los ritos «paganos» más profundamente enraizados entre los españoles. Tanto, que ni en tiempos de crisis como los que atravesamos renunciamos a este agasajo que un 83% de los ciudadanos nos concedemos al menos una vez al mes. Y para otorgarnos este sencillo y habitual «homenaje», la inmensa mayoría lo hacemos con una cerveza, esa bebida milenaria y espumosa a la que nos mantenemos fieles incluso en tiempos de vacas flacas. Un motivo de orgullo para los cerveceros españoles que, un año más, pulsan las apetencias y hábitos de los consumidores españoles para constatar que su producto, esa cervecita rubia y fresquita que trasegamos tanto en las barras de los bares como en el salón de casa, es la reina indiscutible del aperitivo. Preferimos tomarla fuera de casa y en compañía, y cada vez nos gusta más la que no tiene alcohol. La acompañamos casi siempre (un 94% de las ocasiones) con algún alimento, la mayor parte de las veces con unas aceitunas. Y es que si la cerveza es la «reina» indiscutible del aperitivo, las olivas son «las princesas». Así lo constata el estudio de consumo «El aperitivo de los españoles» realizado por la consultora «Quota Research» para «Cerveceros españoles». Las aceitunas son el picoteo favorito para tomarse unas cañitas (40%), seguidas de las patatas bravas (34%), la tortilla de patatas (33%), las patatas fritas y el queso (23%), las croquetas (22%), los calamares a la romana (21%), las rabas y las patatas ali-oli (20%), la ensalidilla y los frutos secos (19%) y los boquerones en vinagre. Este patrón no se repite con exactitud en todas las comunidades, de modo que las excepciones regionales colocan entre los aperitivos favoritos el pulpo a feira y la empanada en Galicia, las rabas en Cantabria, las almendras fritas en Murcia o la Torta del Casar en Extremadura. Durante todo el año ese 83% de los ciudadanos que disfruta del aperitivo lo hace «al menos una vez al mes», porcentaje que se eleva hasta el 91% en verano. Casi la mitad de la población lo toma «una o dos veces por semana», frecuencia que aumenta en verano entre la mitad de la población amante del aperitivo. Un hábito que además tiene un marcado cariz social y lúdico, ya que preferimos tomar el aperitivo en compañía de amigos (41%), en pareja (29%) o en familia (24,5%). Nos gusta la compañía para el aperitivo pero no el «mogollón», de modo que en un 88% de las ocasiones preferimos ir de cañas en grupos inferiores a cinco personas y sólo un 12% prefiere los grupos más numerosos. También preferimos disfrutar del aperitivo cervecero fuera a de casa (72% de los casos) y aún más en verano (85%). Las mujeres disfrutan más de estas salidas con aperitivo (87%) que los varones (82%). Unos momentos de asueto a los que dedicamos una media de 49 minutos durante todo el año y 67 en los meses estivales. Comunidades A escala nacional, la cerveza aparece como la bebida preferida para el aperitivo en un 72% de los casos, seguida de los refrescos de cola (35%), el vermú (23%), los zumos y el té frío o combinado, (14%), los refrescos de naranja (12%), el tinto de verano y la sangría (10,5%), otros refrescos (10%), limonada (9%), sidra (7%) y tónica (5%). En Aragón, La Rioja, Extremadura, País Vasco y Castila La Mancha, después de la cerveza aparecen el vino y el vermú como bebidas favoritas para el aperitivo, mientras que en Asturias es la sidra la que se colca en segundo lugar. Por Comunidades Autónomas, Extremadura es la comunidad más cervecera a la hora del aperitivo (85%), seguida de Aragón y Castilla la Mancha (78,5%), Madrid, (77%), Murcia (74%), Castilla y León (75%), Murcia (74%), Baleares (72%), Navarra, Cataluña y Valencia (71%), Galicia (70%), País Vasco (69%), Canarias (68%), La Rioja (64%) y Andalucía y Cantabria (63,5%). Optimismo No resulta extraño que Jacobo Olalla Marañón, director general de Cerveceros Españoles, no oculte su optimismo ante la vitalidad de un mercado, que, a pesar de no mantener la curva ascendente de los últimos años, se mantiene a flote en medio de la crisis. Y eso que se estima que en lo que va de año el consumo de cerveza puede haber caído un 6%. Recuerda Jacobo Olalla que somos el tercer productor de cerveza de Europa, sólo por detrás de Alemania y el Reino Unido. En consumo nos movemos en la media europea -57 litios «per cápita» en 2007, tres veces menos que alemanes o checos- pero estamos creciendo exponencialmente en el consumo de cerveza sin alcohol. Es este un segmento que no hace más que dar alegrías a los fabricantes. «España es ya el primer país europeo en producción y consumo de cerveza sin alcohol, tanto, que un 15% de toda la cerveza que consumimos es de baja o nula graduación alcohólica» se felicita Jacobo Olalla. Nada raro si se tiene en cuenta que la cerveza está tan profundamente enraizada en la cultura gastronómica española como el vino y que, según Olalla, «los restos arqueológicos más antiguos que nos dan noticia del consumo de cerveza en Europa son españoles y están datados hace 4.000 años». Jacobo Olalla se felicita también por la excelente calidad de los fabricantes españoles. El estándar de calidad de la cerveza española es alto y compite mejor que bien con los fabricantes europeos. «No en vano -destaca Olalla- una de las tres mejores escuelas europeas de cerveceros se encuentra en España. Las otras dos están en Alsacia y Baviera -quizá las regiones cerveceras con más tradición- pero somos nosotros los que estamos formando a los cerveceros hispanoamericanos».