Los ríos españoles han perdido un 5% de su caudal en dos décadas

Según recoge el Informe «Agua y Sostenibilidad: Funcionalidad de las cuencas», elaborado por el Observatorio de la Sostenibilidad en España (OSE), nuestro país consume agua por encima de los recursos de sus cuencas, que cada vez serán más escasos debido al cambio climático. Por eso, se reclama implantar una política basada en la nueva cultura del agua, que tenga en cuenta que hay que consumir menos y cuidar los ecosistemas de forma integral. Se indica, además, que en los últimos 20 años los ríos y otras fuentes de agua superficiales han perdido el 5% de su caudal. Se da la circunstancia de que, también en los últimos 20 años, las precipitaciones se han reducido un 5% y los estudios indican una tendencia a la baja. «Hay un desequilibrio entre las aportaciones naturales y las extracciones de las cuencas y, si no se mantiene un equilibrio, no tendrán capacidad para abastecer de agua a las personas y a los ecosistemas en general», ha explicado Luís Jiménez, director del OSE. «Las cuencas son fábricas de agua, por lo que es muy importante cuidarlas y hacer con ellas una gestión sostenible e inteligente. Para conseguirlo es necesario disponer de más información, una mejor planificación y aumentar la participación y el compromiso ciudadano», aseguró. Más demanda Con el crecimiento de la población también lo hace la demanda de recursos hídricos. El volumen total de agua para abastecimiento público en 2005 alcanzó los 4.873 hectómetros cúbicos, de los que el 82% se distribuyó para el consumo familiar, de los municipios y los sectores económicos. El 18% restante fueron pérdidas. El agua distribuida a los sectores económicos ha aumentado en 1996-2005 un 25%, la de los hogares un 13% y la distribuida a los consumos municipales un 9%. En el periodo 1996-2006 el consumo de fertilizantes ha presentado una evolución similar, mostrando en los tres últimos años un ligero descenso. Sin embargo, la agricultura no sólo se orienta hacia un uso más intensivo del agua, sino también hacia pautas de transformación de superficies de secano a regadío, con el consecuente aumento en el uso de fertilizantes. Según el informe, «en los próximos años se espera que la calidad del agua siga aumentando a medida que se arreglan las actuales carencias en materia de saneamiento y depuración». En cuanto a la reutilización del agua, el texto destaca que su volumense ha duplicado en nueve años, superando los 1,2 millones de metros cúbicos en 2005. De acuerdo con los datos que maneja el Ministerio de Medio Ambiente, se reutilizan al año entre 400 y 450 hectómetros cúbicos de los 3.400 que se depuran, el 80% de ellos destinados a riego agrícola. En el estudio se indica que, a pesar de que el volumen de agua depurada ha aumentado significativamente en los últimos años, no ocurre lo mismo con el porcentaje de agua que es reutilizada sobre el total de agua depurada debido, sobretodo, rechazo de la población a utilizarla. Por otro lado, España no ha cumplido los objetivos europeos en cuanto a la depuración de aguas residuales, ya que en el año 2005 sólo el 77% de las depuradoras cumplía los criterios marcados por la UE. El informe denuncia falta de información para valorar adecuadamente el estado de las depuradoras y marca como principal objetivo principal mejorar el control y vigilancia de estas instalaciones Y respecto a las desalinizadoras, existen actualmente más de 700 con una capacidad de desalación de 3,3 millones de metros cúbicos al día. En el periodo 2001-2004 produjeron 120 hectómetros cúbicos de agua potable al año, cuando el objetivo es alcanzar los 620. Y por si no fuera poco con que los ríos pierdan caudal, el agua de mar avanza tierra adentro, en especial en las cuencas del Segura y del Júcar. El grado de salinidad del agua es cada vez mayor debido a la falta de precipitaciones y a un consumo excesivo del agua.