Diario de León

¡Mi gato tiene acné!

El acné felino es una dermatopatía muy frecuente que se caracteriza por la aparición de puntos negros en la zona del mentón

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León

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|||| Algunos lo padecen de forma aislada y en otros es recurrente a lo largo de toda la vida. Puede afectar a gatos de cualquier edad y raza pero sobre todo a aquellos inmunodeprimidos. La causa de este proceso es desconocida, existiendo mútiples factores que pueden predisponer al animal a apadecerlo, como puede ser un excesivo acicalamiento o algunas enfermedades: demodicosis, tiña, dermatitis atópica o por ejemplo el estrés por un cambio de domicilio.

Las lesiones se localizan sobre todo en el mentón, labio inferior y a veces en las mejillas y aunque inicialmente no producen picor puede progresar a cuadros más graves. Se forman los clásicos puntos negros o comedones, producidos como consecuencia de una distensión de los folículos pilosos con acúmulos de restos de queratina y lípidos. La rotura de estos folículos y la consiguiente liberación de esos materiales da lugar a una gran reacción inflamatoria que hace que el animal se rasque intensamente y pueda provocar una infección secundaria. En los casos más graves se observan lesiones costrosas, pústulas, foliculitis y forunculosis, con eritemas y excoriaciones derivadas del rascado.

Para su diagnóstico es preciso realizar una serie de pruebas, como raspados y cultivos, que descarten otras patologías cutáneas, ya que estos síntomas pueden ser compatibles con determinadas parasitosis, ácaros y hongos.Es una enfermedad que no tiene cura pero si existen muchos métodos para tratarla y controlarla periódica o continuamente. El tratamiento va a depender de la gravedad de las lesiones. Si hay un pequeño número de comedones asintomáticos a veces no es necesario intervenir, en cambio si las lesiones son más extensas con seborrea, costras e inflamación deberemos acudir al veterinario. La aplicación de baños con productos específicos así como una antibioterapia (incluso corticoterapia) si el cuadro es más grave, ayudarán al felino a superar el proceso.

Los perros tambien pueden sufrir acné, aunque en ellos es menos frecuente y al igual que ocurre en los gatos, la etiología es desconocida. Las lesiones se asientan en el mentón y en los labios, preferentemente en perros jóvenes y de razas con pelo corto, Bulldog, Pointer, Dobermann o Pinscher entre otros.

Para ambas especies hay que tener en cuenta que, aunque veamos en nuestra mascota los signos típicos compatibles con acné, es necesario llevar a cabo pruebas que descarten otro tipo de patologías, ácaros, tiña o alergias, antes de comenzar un tratamiento.

De no ser así podrían agravarse los síntomas. La única prueba diagnóstica es la recogida de una biopsia para su confirmación histopatológica, aunque rara vez se realiza y el diagnóstico acaba siendo por descarte.

Aunque su verdadera causa final no se conoce con exactitud, los tratamientos dirigidos a su control resultan eficaces en la mayor parte de los casos.

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