El protagonismo de ciudades como León
|||| Se ha destacado, probablemente en exceso, el protagonismo de la España rural en la Guerra de la Independencia, tanto por el origen y el papel de la guerrilla como por la importancia que las grandes batallas en campo abierto tuvieron en el conflicto. Sin embargo, el levantamiento antifrancés de mayo de 1808 fue fundamentalmente un fenómeno urbano, protagonizado por la población de las ciudades y articulado en torno a las instituciones, de mayor o menor rango, con sede en ellas: los ayuntamientos, las audiencias provinciales y a veces las capitanías generales. Ese poder local conquistado por la población sublevada sirvió para llenar el vacío de poder creado por el derrumbe del Estado borbónico. De esta forma, las nuevas instituciones locales, denominadas juntas, impulsaron, de abajo arriba y de la periferia hacia el centro, un nuevo Estado legitimado en una soberanía nacional de facto, constituido a su vez como una red de ciudades en lucha .
León es un buen ejemplo de las primeras ciudades que se levantaron contra la intervención francesa -”lo hizo el 27 de mayo, antes que cualquiera otra de la capitanía general de Castilla la Vieja-” y en ella se produjo también una de las primeras expresiones de desconfianza ante la actitud de los aliados/invasores el 24 de abril de 1808. El levantamiento leonés influyó en el de Galicia y, probablemente, en las otras provincias de Castilla y León. El proceso de constitución de su Junta, también la primera que se establece en la capitanía, es especialmente interesante. Creada por la presión de la movilización popular y frente a la actitud colaboracionista de las autoridades, su núcleo inicial será el Ayuntamiento pero incorporó a vocales elegidos por los vecinos de la capital y de las ciudades y pueblos cabeza de comarca de la provincia. En julio se convirtió en el núcleo de la Junta de León y Castilla que elegiría a los representantes de las provincias castellanas y leonesas en la Junta Central. Entre ellos estará el ilustrado Antonio Valdés, su presidente, que mantuvo un significativo pulso con el capitán general, Gregorio de la Cuesta, durante el verano de 1808. La Junta, configurada inicialmente en torno al Ayuntamiento de la capital, logra articular el movimiento antifrancés de toda la provincia y pronto sus dimensiones desbordan ese ámbito estrictamente local. Ciudad y provincia estarán estrechamente vinculadas durante todo el conflicto, en el que cobrarán dimensión propia la ciudad de Astorga y la comarca del Bierzo, en la que, debido a la evolución del conflicto, residirá con frecuencia la Junta provincial.
Los sitios de Astorga
La liberación de Galicia, en la primavera de 1809, convirtió a la provincia de León en territorio fronterizo, lo que le hará jugar un papel especialmente importante como frente bélico. Por esta razón, la ciudad de Astorga cambiará en varias ocasiones de manos y sufrirá dos prolongados sitios (en 1810 y 1812) por parte de los franceses, primero, y de los españoles, después. Por su parte, la ciudad de León es una muestra de localidad protagonista de levantamiento, que fue ocupada por los franceses durante un periodo relativamente largo y que también presenta rasgos de población fronteriza, que sufrirá frecuentes cambios de dueño. Además, León es la única provincia de Castilla y León donde las elecciones de diputados a Cortes podrán celebrarse antes de 1813 y tanto la representación de los diputados de provincia como los de la Junta y ciudad estará presente en los debates parlamentarios.
(Texto extraído de las informaciones oficiales sobre la exposición)