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Un grabado para el Silencio

La cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y del Silencio presenta el próximo sábado un nuevo grabado que recuerda la autoría leonesa del famoso himno a Jesús de Medinaceli, obra del padre Uriarte y Mauricio de Begoña

El maestro grabador José Holguera muestra el resultado final de su trabajo

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León

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|||| Aún queda poco más de un mes para Semana Santa pero la cofradía leonesa del Santísimo Cristo de la Expiración y del Silencio ya prepara una serie de actos entre los que se encuentra la presentación -”el próximo sábado día 7-” de un bello grabado que recuerda la autoría, en gran parte leonesa, del famoso himno al Cristo de Medinaceli, una de las oraciones más populares de la Cristiandad.

Recuerdan los responsables de la cofradía que fue en el año 1926 cuando el padre Rainiero de Ponferrada, director de la archicofradía primaria de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro padre Jesús Nazareno, erigida en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli de los Padres Capuchinos de Madrid, «decidió llevar a cabo el proyecto de disponer de un himno propio, podríamos decir que casi oficial, y que pudiera ser empleado en los múltiples actos que a lo largo del año se vienen celebrando en honor de Jesús Nazareno».

Y así fue como salió a concurso tanto la letra como la música. «Para la letra fue elegida la escrita por el padre Mauricio de Begoña, capuchino de esta provincia; la música escogida fue la propuesta por el Maestro de Capilla de la Catedral de León, Manuel Uriarte», continúan. Desde aquel momento y hasta ahora se ha venido utilizando «en los distintos cultos que se celebran en honor de Jesús Nazareno de Medinaceli, que cuenta en todo el mundo con multitud de fieles, especialmente en España y América».

En lo que respecta a la capital leonesa, fue a principios de los años cuarenta cuando los padres Capuchinos regalaron a nuestra ciudad una copia de la imagen del Jesús de Medinaceli de Madrid. «Desde su llegada, la imagen fue acogida por los leoneses con gran devoción, se integró en nuestra Semana Santa y pasó a ser titular de la Procesión del Silencio, que venía celebrándose desde 1938», informa la cofradía.

Himno cantado por los leoneses

Con ella también llegaron los cultos que le son propios: el Triduo y Besapié del primer viernes de marzo, así como el canto de su himno. Un himno que ha sido cantado por la Escolanía que existió en el convento, por los miembros de la O.F.S. «y por varias generaciones de leoneses que han acompañado a Jesús Nazareno por nuestras calles y plazas».

En la actualidad, la cofradía, que confirma haber nacido con el único afán de colaborar con la Orden Franciscana Seglar y con los padres Capuchinos «en el mantenimiento y mejora de los actos que con motivo de la pasión de Cristo se celebran en su casa», es la organizadora de la Procesión del Silencio y colaboradora en la muy popular del Dainos , «y tiene como propios los cultos y el himno a Jesús Nazareno de Medinaceli».

«Con el único propósito de dar a conocer el himno, esta cofradía ha confeccionado un bello grabado, obra de José Holguera, grabador de nuestra ciudad, que el sábado presentaremos y que se puede adquirir en las dependencias de la cofradía o en el propio taller del grabador, situado en la calle Puerta Moneda, 5, de León», explican.

Por último, la cofradía del Silencio ha querido agradecer la colaboración de la cofradía de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz, «que una vez más, y de forma desinteresada, a nuestra petición, ha decidido incluir en el repertorio de su banda de música la adaptación para banda del himno a Nuestro Padre Jesús Nazareno, Cristo de Medinaceli, que nos ha sido facilitada por los padres Capuchinos de Madrid y que será interpretada en nuestros actos por la mencionada agrupación musical».

De otro lado, el grabador José Holguera comenta que el grabado es una estampa «que se compone de un texto y de cinco planchas». «El texto está hecho a mano, con letra gótica escrita con plumín metálico siguiendo los modelos caligráficos del siglo XIV», y en cuanto a las estampas talladas en plancha, éstan son: el emblema de la cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y del Silencio, realizado en cobre. Un escapulario unificado con cruz trinitaria y S con clavo. La partitura, referente al citado texto. El Cristo de Medinaceli, plancha tallada en linóleo y entintada a rodillo con tinta tipográfica morada. Y escultura de San Francisco, plancha tallada en zinc. «Todo ello -”explica José Holguera-” se ha estampado a una sola pasada en tórculo según técnicas del siglo XVI, empleando un papel de algodón para su grabado».

Donación del 20%

Una vez finalizada la serie, se entregarán las planchas a la cofradía «para que así conste en el patrimonio de todos los hermanos», recalca. Además, del valor de venta de cada grabado será donado un 20% a la cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y del Silencio al igual que la misma estampa, también donada y que quedará expuesta en la sede de la hermandad, ubicada en el convento de los padres Capuchinos de la ciudad de León.

La presentación oficial del grabado tendrá lugar el sábado 7 de marzo a las 19.30 horas, un acto en el transcurso del cual también actuará la banda de música de la Cofradía de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz.