Y Nacho Vegas se hizo actor
|||| El músico asturiano parece decidido a sorprender, paso a paso y con el más difícil todavía como lema. En esta ocasión se trata de sumergirse en la interpretación en un cortometraje de 8 minutos, titulado Más que a mi suerte y dirigido por Elena López. Vegas encarna a un hombre que regresa a su tierra para recoger las cenizas de su madre y allí conoce a dos mujeres con las que entabla una enigmática y confusa relación.
Más que analizar las dotes actorales de Nacho Vegas, lo que destaca, una vez más, es su capacidad por apostar por proyectos que le interesan sin mirar ni la matrícula ni las exigencias comerciales. Con su tirón, eso sí, ha conseguido que durante toda una semana se proyectara en un céntrico cine de la capital. Un milagro, dadas las conocidas dificultades con las que se encuentran los jóvenes realizadores que no quieren saltarse casillas en la difícil carrera de director de cine.
Con algunas otras participaciones en proyectos audiovisuales y documentales, Nacho Vegas demuestra que su proyección creativa no se queda en la mera composición de canciones. Aunque, para este apartado, tiene en plena actualidad y en gira su último trabajo, el excelente Manifiesto desastre .