Cerrar

Crónica | paula de las heras

Blanco y mucho más

La designación del triunvirato para la comisión anticrisis dispara las especulaciones de un cambio de Gobierno; el ministro de Fomento suena como vicepresidente

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Que se iba. Corrieron ríos de tinta en los días finales de la legislatura pasada sobre el futuro del entonces secretario de Organización del PSOE, José Blanco. Que no quería eternizarse en la política, que sus aspiraciones estaban ya colmadas, que quizá era el momento de dar el salto al sector privado. Fue él mismo quien dejó caer que ya había interiorizado su marcha tras ocho años desempeñando la misma función: hombre fuerte de José Luis Rodríguez Zapatero, capaz de tener al partido en un puño. Pero no sólo no se fue. Su ascenso, en este período, ha sido continuo.

En menos de dos años, y cuando su formación está a la baja en las encuestas, Blanco ha subido dos importantes peldaños en el escalafón del poder político. Primero, en el 37 Congreso del PSOE celebrado tras las generales del 2008, fue nombrado vicesecretario general, un cargo que no existía desde los tiempos del todopoderoso Alfonso Guerra, y apenas un año después Zapatero le llevó al Gobierno para armar políticamente a un gabinete excesivamente técnico que era ineficaz para ganar la batalla de la opinión pública en tiempos de zozobra económica.

El hecho de que el presidente haya vuelto a recurrir a él para integrar la comisión anticrisis le ha elevado a los titulares. Zapatero esgrimió que su presencia en esta célula, junto a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, y el titular de Industria, Miguel Sebastián, se debe a que los tres «son los miembros del Gobierno más directamente concernidos con las reformas». Pero, en realidad, cuesta ver la relación de la cartera de Fomento con los temas de debate.

Peso político. La razón verdadera es otra. La explica una de las pocas personas que asisten cada lunes a las reuniones de maitines en La Moncloa, donde se trató este asunto: «Hacía falta dotar de peso político a una comisión que de otro modo habría tenido un perfil casi exclusivamente técnico».

Es precisamente este hecho el que ha dado pie a interpretar que la vicepresidenta De la Vega, ha quedado arrinconada.

Los socialistas aguardan una crisis gubernamental a la vuelta de la presidencia de turno de la UE, que acaba en junio. Y la salida de De la Vega lleva mucho tiempo en las quinielas. Por contra, Blanco ha dado un vuelco a su imagen pública.

Adelgazó 12 kilos, cambió peinado y gafas, refinó el estilo y, sobre todo, encontró otro tono. Ahora suena como nuevo vicepresidente del próximo Gobierno.

Cargando contenidos...