Cardiología abre la rehabilitación cardíaca a los pacientes de los pueblos más alejados
Diseña un proyecto de investigación con cien enfermos para que practiquen ejercicios en su casa
El Servicio de Cardiología del Hospital de León, con el doctor Esteban García Porrero al frente, se ha empeñado, pese a que las autoridades sanitarias de la comunidad han rechazado una estrategia común en todos los hospitales, en ampliar la terapia de rehabilitación cardíaca a todos los enfermos de los pueblos alejados de los centros de salud, con una gran demanda asistencial. Para que los pacientes infartados se beneficien de los ejercicios, que reducen hasta un 30% las posibilidades de sufrir un segundo infarto, García Porrero lidera un proyecto de investigación con un primer grupo piloto de cien pacientes de los pueblos de León, que son los que más dificultades tienen para acudir a las terapias presenciales en el Hospital Monte San Isidro, donde actualmente se realizan los ejercicios. «Queremos demostrar en León que la rehabilitación cardíaca en casa, con ejercicios que el paciente aprende antes en el Hospital, con entrevistas de control periódicas y con la asistencia a los cursos que organizamos, tienen los mismos beneficios sobre la salud del paciente que si acudieran al centro hospitalario».
Y es que los datos de los estudios no dejan lugar a dudas: «el ejercicio físico es la medida más efectiva y saludable de la sociedad para mejorar la salud, pero en las enfermedades de corazón es aún más importante», asegura Porrero.
No habrá ampliación. El Hospital de León es el único de la comunidad que ofrece este servicio gracias al empuje del doctor Porrero que se propuso hace doce años llevar adelante su proyecto. Sin el apoyo institucional, sólo cincuenta pacientes se benefician de esta terapia al año, de los 1.200 que podrían acceder a los ejercicios. La gerencia del Hospital apuesta por el mantenimiento del servicio existente, pero descarta ampliar la cobertura a más pacientes, como esperaban los profesionales del servicio cuando finalizaran las obras. Las autoridades sanitarias de Castilla y León no han implantado una estrategia de rehabilitación cardíaca en los hospitales de la comunidad, pese a que está recogida en sus planes de salud y avalada por la Organización Mundial de la Salud y la Sociedad Europea de Cardiología. Pero la situación en Castilla y León no difiere de la que hay actualmente en el resto de las comunidades. En España, la rehabilitación cardíaca sólo llega al 3% de los enfermos infartados, un porcentaje muy bajo comparado con otros países europeos en los que, como Irlanda o Italia, se rehabilitan el 100% de los pacientes. «La Sociedad Europea de Cardiología ha insistido en el Parlamento Europeo en la necesidad de que las personas que nazcan en este siglo no padezcan enfermedad cardiovascular antes de cumplir sesenta años», explica García Porrero.
La procuradora socialista en la Cortes, Victorina Alonso, vio como el PP rechazaba hace dos semanas una proposición no de ley para poner en marcha un plan integral en la comunidad, «pero aunque reconocen que es necesario, no nos dieron ningún argumento cuando lo rechazaron», afirma Alonso.