El PP reclama la cadena perpetua revisable para asesinatos terroristas
El PSOE cree que la medida viola la Constitución, pero acepta las tesis del PNV y la izquierda y apoyará reducir la duración de la libertad vigilada para reos peligrosos
El PP reclama entre sus más de cien enmiendas al proyecto de reforma del Código Penal la instauración en España de la cadena perpetua para los asesinatos terroristas, las muertes tras agresión sexual, los magnicidios y los delitos de genocidio y de lesa humanidad.
Los populares, que denominan su fórmula como prisión permanente revisable, pretenden que los condenados a esta pena no puedan nunca salir de la cárcel antes de 20 años, momento en el que el tribunal podrá revisar la condena si el reo cumple una serie de condiciones: pronóstico de reinserción, arrepentimiento e indemnizaciones pagadas. No obstante, este examen, que se podría repetir cada cinco años si el preso no cumple las condiciones en el anterior, no permitiría la liberación en los primeros controles si se entiende que los hechos por los que fue condenado son de extrema gravedad.
La medida planteada por los populares no tiene prácticamente posibilidades de ser incorporada al Código Penal porque el PSOE reiteró su oposición total a apoyarla, ya que cree que viola la Constitución, y porque en igual posición de rechazo se colocan la izquierda, parte del grupo mixto y el PNV.
El primer examen del proyecto de reforma del Código Penal remitido al Congreso por el Gobierno, que prevé modificar casi 150 artículos del texto actual, se producirá mañana en el pleno, con el debate de las tres enmiendas a la totalidad (ERC-IU, PNV y ERC) que reclaman la devolución del documento al Ejecutivo por entender que pretende endurecer las penas de manera desproporcionada. El proyecto posiblemente pasará este primer filtro.
A partir de ese momento el texto comenzará el trámite de enmiendas en comisión y los socialistas tendrán que comenzar a realizar cesiones, con la mirada puesta de forma especial en PNV, CiU y PP ya que por el momento no cuentan con apoyo alguno declarado de otros grupos y precisan al menos de otros siete diputados a parte de los suyos para alcanzar la mayoría absoluta (176) y sacar adelante la reforma.
Las enmiendas al texto original presentadas por el grupo socialista hacen varios guiños a PNV, CiU y a alguno de los grupos de izquierda. Con la vista puesta en los nacionalistas vascos, reducen la duración máxima de la nueva medida de libertad vigilada, a imponer a delincuentes peligrosos que salen de la cárcel, de 10 a 5 años y establecen que pueda ser revisada cada año. Sólo pueden llegar al antiguo tope de 10 años de control los terroristas y los violadores patológicos.
Satisfacen alguna de las peticiones de CiU con la introducción de un agravamiento de penas, incluso de cárcel, a los reincidentes que cometen más de tres pequeños robos en el plazo de un año.