Crónica | paula rosas
Los amigos, presentes
Vilalta y Pascual siguen en manos de los terroristas
Los miércoles se pide la libertad de los secuestrados.
La alegría por la liberación de Alicia Gámez era agridulce. Albert Vilalta y Roque Pascual siguen en manos de Al Qaeda en algún punto del desierto del norte de Mali.
El pasado 5 de marzo, una nueva demanda de los terroristas comandados por Mojtar Belmojtar, el jefe de la célula que retiene a los españoles, complicaba la liberación de los cooperantes. Los secuestradores pidieron, a través de los negociadores, la excarcelación de presos islamistas detenidos en Mauritania. En un primer momento sólo se había exigido el pago de un rescate millonario, que algunas fuentes cifraban en cinco millones de dólares.
Sin embargo, el gobierno de Nuakchot se niega a indultar a ningún preso, como hicieron el pasado 22 de febrero las autoridades de Mali para conseguir la liberación del francés Pierre Camatte.
Es posible que aún haya que esperar semanas, si no meses, para conseguir el rescate de Vilalta y Pascual, como se ha visto en secuestros anteriores.