Cerrar

Roldán: «He pagado duramente por lo que hice y otros se han ido de rositas»

El ex director de la Guardia Civil queda en libertad sin haber devuelto el botín

Roldán, camino a su casa tras firmar su carta de libertad.

Publicado por
colpisa | zaragoza

Creado:

Actualizado:

Gafas de sol, bufanda granate y gorra. Así ataviado salió Luis Roldán del Centro de Inserción Las Trece Rosas de Zaragoza a las ocho y media de la mañana de ayer tras firmar su carta de libertad.

Ha cumplido en prisión, gracias a las rebajas que permitía el Código Penal, 15 de los 31 años a los que fue condenado, aunque en realidad sólo ha pasado diez entre rejas porque en el 2005 consiguió el segundo grado y su relación con la vida penitenciaria de limitaba a dormir ese centro, mientras el resto del día lo pasaba fuera, en su domicilio de la capital aragonesa.

Con más kilos de los que entró y sin la ceñida gabardina con que llegó de Bangkok, Roldán, de 66 años, jubilado y casado por tercera vez, es un hombre libre. Ha salido sin devolver el botín. «Ya no tengo que venir a dormir» a Las Trece Rosas, comentó serio a la salida del centro. Seriedad que se acrecentó al comentar que ha «pagado» con creces, «duramente», los delitos que cometió, aunque «otros no han pagado» y «se han ido de rositas o casi de rositas».

No dijo a quien se refería, pero es muy probable que aludiera a Francisco Paesa, el misterioso intermediario, siempre al servicio del mejor pagador, al que acusa de haberse quedado el botín que tenía depositado en Suiza. Paesa, desde su refugio, se cree que en Luxemburgo, lo ha negado siempre. Pero Roldán recordó ayer que en 1994, el ex espía que para su captura estuvo al servicio de Interior dijo que «(el dinero) lo tenía él, que era suyo y se fue por la puerta con las manos en los bolsillos».

Vida normal. El ex director de la Guardia Civil pretende llevar a partir de ahora «una vida normal» en Zaragoza con «la pequeña pensión» que tiene porque se ha calculado sobre sus últimos 15 años de actividad laboral, un tiempo que ha estado en la cárcel.

El dinero que percibe es un misterio, algunas informaciones apuntan a que recibe todos los meses 600 euros de un ex alto cargo de Interior, pero desde luego no se exhibe como un derrochador en su quehacer cotidiano en la capital aragonesa. Vive en un edificio de clase media, del que fue presidente de la comunidad de vecinos, y se dedica a dar largos paseos.

Roldán se mostró disgustado porque le atribuyan que es poseedor de una gran fortuna escondida en algún lado cuando lo cierto es que, según su versión, ese dinero no está en su poder y nadie intentó «buscarlo ni localizarlo».