Perfil
De centro-derecha y ven a Zapatero laicista y anticlerical
No se hacía un perfil tan completo del clero español desde 1969. Y son muchos los aspectos que llaman la atención en esta encuesta realizada en el año 2007, cuando Zapatero estaba a punto de concluir su primera legislatura como presidente del Gobierno o cuando ya se empezaban a difundir escandalosos casos de abusos sexuales en el seno de la Iglesia, asuntos ambos que pueden ayudar a contextualizar las respuestas de los entrevistados en torno a la política o la opción del celibato.
Los autores del trabajo aseguran que a los sacerdotes «les cuesta» definirse políticamente. De hecho, cuatro de cada diez optó por no responder a este tipo de preguntas, circunstancia que se atribuye a que confunden «no meterse en política» con «no tener opción política». La mayoría de los que sí contestaron se sitúa en una franja que va del centro-derecha a la derecha (31%) frente a los que se declaran de centro-izquierda o izquierda (28,5%).
En este contexto, seis de cada diez sacerdotes se adhieren a los postulados oficiales de la Conferencia Episcopal Española y consideran que la política desarrollada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero es «anticlerical y laicista». Llama la atención que una cuarta parte de los entrevistados piensen que «no hay grandes diferencias en lo que han hecho los distintos gobiernos de la democracia en relación a la Iglesia». Cuanto más jóvenes son los curas, más conservadores. Es precisamente en los grupos de edad más jóvenes donde se encuentra el mayor grupo de los que se decantan por la opción política de derechas.
Respecto a la figura de Benedicto XVI, son pocos los que confían en que reforme la curia vaticana. Uno de cada tres curas asegura que el actual Papa «todavía dará alguna sorpresa positiva», aunque no sepan cuál. El 24% sostiene que durante su pontificado «se producirá un avance sustancial en el ecumenismo». Sólo uno de cada diez espera una encíclica histórica de Joseph Ratzinger.
La autofinanciación de la Iglesia es uno de los temas que cuenta con una opinión más clara por parte de los sacerdotes. Dos de cada tres creen que es hora de que la iglesia renuncia a la financiación del Estado «para ser más libre». «La aportación del Estado es justa por lo que la Iglesia aporta a la sociedad», es lo que creen el 23,3% de los entrevistados.
Si hay algo que moleste a este colectivo es la mala imagen pública de la Iglesia. Entre los comentarios que se han recopilado, abundan los que mencionan que esa imagen que se debe a que «la gente que opina lo hace sin conocimiento de causa de lo mucho y positivo que hace la Iglesia», o los que piensan que los ciudadanos confunden «Iglesia» con «jerarquía eclesiástica».
Una de las circunstancias vitales que más ha cambiado en la vida de los sacerdotes durante las últimas décadas es su aspecto. El traje talar o sotana se ha metido en el armario y ha dejado de ser su imagen de marca utilizada tan sólo por uno de cada cien sacerdotes Tres de cada cuatro visten ropa civil y son mayoría los que no llevan distintivo alguno. Uno de cada cuatro utiliza el clergyman y llama especialmente la atención que sean los grupos más jóvenes. Los mayores, sin embargo, son los que más visten de civil.