Los abogados dieron a ETA datos para asesinar a Rubalcaba
El ministro dice que eran «los comisarios políticos de la banda en las cárceles»
Los diez abogados y militantes aberzales detenidos por la Guardia Civil el miércoles por colaborar con ETA pasaron información a la banda para atentar contra el ministro del Interior, según informó ayer el propio Alfredo Pérez Rubalcaba. El máximo responsable de la lucha antiterrorista insistió en que los datos sobre su persona fueron facilitados a ETA «para que los utilizara con las peores intenciones», pero no quiso dar más informaciones sobre el asunto.
No obstante, mandos de la lucha antiterrorista revelaron que las informaciones sobre el ministro se referían a que solía frecuentar «hace bastante tiempo», con amigos y colaboradores, un conocido restaurante del centro de Madrid, no demasiado alejado de la Audiencia Nacional, tribunal al que los letrados acudían para asistir a sus clientes.
El titular de Interior quiso dejar claro que la labor de estos abogados «excedía con mucho el marco legal» de la asistencia jurídica a sus patrocinados ya que, en realidad, eran los «comisarios políticos de la banda en las cárceles».
Los disidentes, a cárceles vascas. Mientras, Interior ha trasladado a la cárcel alavesa de Nanclares de Oca a tres de los presos de ETA más conocidos por su disidencia. Se trata de José Luis Urrusolo Sistiaga y Carmen Guisasola, dos de los cuatro primeros activistas que hicieron públicas sus críticas a la banda y que ya han sido expulsados de ETA, y Rafael Caride Simón, condenado a 790 años de prisión por su participación en la masacre de Hipercor.
Mientras, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acordó en la jornada de ayer la puesta en libertad previo pago de una fianza de 50.000 euros de diez dirigentes de la última Mesa Nacional de la ilegalizada Batasuna, entre los que se encuentran algunos responsables de los también proscritos Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) y Acción Nacionalista Vasca (ANV).