El Gobierno licitará a partir del verano las infraestructuras del plan extraordinario
José Blanco reveló ayer que los contratos para las inversiones del Plan Extraordinario de Infraestructuras (PEI), que tendrá un presupuesto de 17.000 millones de euros en dos años, se licitarán a partir de este verano y durante el 2011.
Ante las nuevas circunstancias, este programa «adquiere una mayor relevancia», pero es necesario revisar la relación de proyectos en los que se estaba trabajando, para incorporar aquellos que cumplan los requisitos exigidos, y que «ahora se verán afectados por el nuevo escenario presupuestario».
Dado que el plan apuesta por la sostenibilidad del sistema de transporte y «responde a las prioridades que nos hemos marcado», la mayor parte de la inversión se destinará al ferrocarril, tanto para el transporte de mercancías como de viajeros, y el resto a carreteras, fundamentalmente para concluir los grandes ejes viarios.
El plan supone «un nuevo modelo de financiación de las obras públicas, abierto y participativo, que incorpora los criterios de sostenibilidad y consagra los análisis coste-beneficio de las infraestructuras», destacó.
Por ello, subrayó que se debe analizar «de forma rigurosa» los gastos de explotación y gestión de los servicios de transporte, teniendo en cuenta los reglamentos comunitarios que indican los supuestos en los que es posible una obligación de servicio público.
Para ello se tendrán en cuenta los servicios en los que se garantiza su rentabilidad social y medioambiental, agregó Blanco.