Reportaje | antonio montilla
El PP toma el lenguaje social
Los populares no dudan en pisar sus fronteras ideológicas y se proclaman como defensores de los trabajadores
Al PP se le queda pequeño el centro político. Mariano Rajoy puja por amasar una mayoría suficiente para gobernar en el 2012 sin necesidad de recurrir a la geometría variable. Los populares persiguen con ahínco ese objetivo y no dudan en pisar terreno históricamente vedado para sus siglas o, incluso, robar al PSOE su lenguaje. El partido que fundó Pablo Iglesias en 1879 se define hoy como «una organización política de la clase trabajadora y de los hombres y mujeres que luchan contra todo tipo de explotación, aspirando a transformar la sociedad para convertirla en una sociedad libre ».
El PP, por su parte, concurrió a las elecciones generales del 2008 bajo el epígrafe: «Somos una formación política de centro. Defendemos los valores de la libertad, la igualdad, la concordia y la justicia que inspiran nuestra España democrática». María Dolores de Cospedal glosó el pasado 6 de junio el nuevo marchamo del PP: «Si no hay sindicatos que sepan defender a los trabajadores, que estos estén tranquilos que aquí está el PP para defenderles». Una reflexión que se podría entenderse como aislada, propia del acaloramiento del debate proselitista ante la aprobación del decreto del Gobierno que congelaba las pensiones y reducía el sueldo a los funcionarios. Pero de eso, nada.
La secretaria general del PP aderezó esta primera declaración de intenciones con otras perlas como que Mariano Rajoy lidera «el partido social y progresista» de España.