Los hosteleros aseguran que «no es el momento» de imponer la Ley Antitabaco

La Ley Antitabaco llega «en el peor momento posible para un sector gravemente afectado por la situación económica», que se enfrenta a este nuevo obstáculo a la vez que tendrá que asumir el próximo mes la subida del IVA, que no piensa repercutir en los precios a los clientes; y el encarecimiento de la tarifa eléctrica. Más trabas econónicas en un momento de crisis económica generalizada y caída del consumo.

Los empresarios y hosteleros leoneses lamentaron ayer que el Ministerio de Sanidad no haya querido atender a sus demandas y haya seguido adelante con la tramitación de una ley (el Congreso admitió ayer su trámite) que impedirá fumar en los espacios públicos cerrados.

«Las consecuencias de esta medida son impredecibles, pero todo cambio da miedo. Lo que está claro es que este no es el mejor momento ni el mejor entorno para abordar una medida de este calado», explicó Pedro Llamas, presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de León. Llamas abogó por un «aterrizaje suave de la norma, y por la realización de test en algunas provincias para comprobar el resultado en las cuentas de las empresas».

Por su parte desde la Federación de Empresarios Autónomos de Castila y León (Feacyl) su presidente, Javier Cepedano (presidente también de la Federación Leonesa de Empresarios) recordó que hace apenas tres años los hosteleros tuvieron que abordar grandes inversiones, «que en muchos casos aún no se han amortizado», para adecuar sus locales a las exigencias de la Ley Antitabaco.

Cepedano lamentó «las pérdidas que este endurecimiento va a suponer para los pequeños empresarios autónomos, que serán cruciales para sus negocios». Explicó también que «hasta hace unos meses la tabla de salvación de muchos autónomos era la hostelería, que les permitía mantenerse».

En la provincia mayo cerró con 4.952 autónomos en hostelería, 44 menos que hace un año.