La Junta aprueba la hoja de ruta que transformará el oeste de la ciudad

El oeste de la ciudad ya ha salvado su último paso para poner en marcha la denominada operación ferroviaria: una planificación urbanística que cambiará el perfil de una zona de la capital, donde las vías del tren han condicionado su crecimiento desde hace décadas. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó ayer, a través de un decreto, el conocido como Prat León Alta Velocidad, el plan regional de ámbito territorial que define las actuaciones urbanísticas que se desarrollarán en este área de León derivadas de la integración del tren y la llegada de la alta velocidad.

Esta operación aprobada ayer afecta a cuatro municipios: la propia capital, San Andrés, Onzonilla y Santovenia. Comprende un ámbito de actuación de algo más de 300 hectáreas con una superficie destinada a la edificabilidad prevista para un total de 5.946 viviendas: 4.022 libres y 1.924 protegidas, además de espacios comerciales, equipamientos, espacios industriales y otras tipologías.

Como si de un PGOU se tratara, el Prat marcará la hoja de ruta para cambiar la fisonomía del oeste de la ciudad con actuaciones como el soterremiento de las vías (desde la plaza de toros hasta la pasarela del Lidl en Trobajo del Camino), la desaparición del paso a nivel de El Crucero y la construcción en el término de la capital de 5.853 viviendas con una previsión de 14.500 nuevos vecinos.

Una moderna estación recibirá el AVE en León (con conexión con la terminal de autobuses y coronada con un torre de veinte alturas). También el Palacio de Congresos, la prolongación de Ordoño hacia el oeste, un nuevo puente a la salida de Lancia y un gran parque.