Sebastián exige a Viloria y Alonso que digan dónde están los 367 millones de las ayudas

El ministro de Industria, Miguel Sebastián, arremetió ayer con la máxima dureza contra los empresarios leoneses Victorino Alonso y Manuel Lamelas por considerar «inesperado, inusual e inaceptable que algunas empresas mineras se nieguen a pagar las nóminas», afirmó en relación al conflicto que vive el sector, y que sufren 2.600 mineros, trabajadores de sus empresas. Ante esta situación, Sebastián aseguró que «hemos acordado y procedido pedir un requerimiento de cuál ha sido el destino de los 367 millones de euros que han recibido desde julio de 2009».

El titular de Industria anunció esta medida al término de la larga y tensa reunión mantenida durante la tarde de ayer, en la sede del Ministerio, y que se prolongó hasta la noche. Al respecto de la situación económica de las empresas de Alonso y Lamelas, y su decisión de no pagar los salarios íntegros pendientes de sus trabajadores, Miguel Sebastián reveló que «hemos entregado a los representantes de los sindicatos un documento que justifica que desde julio de 2009 hasta la fecha han recibido 367 millones de euros de dinero público».

Sebastián apeló al cálculo para reprochar a los dos empresarios implicados en el actual conflicto la falta de cumplimiento para con sus trabajadores: «En un cálculo sencillo, teniendo en cuenta que son 2.600 trabajadores mineros, esa cantidad daría a 141.000 euros por minero», aseguró en referencia a las cantidades ya entregadas por el Estado.

Durante la comparecencia ante la prensa, el ministro socialista adelantó que si no hay respuesta satisfactoria, «se exigirá el reintegro de estas ayudas y se tomarán las medidas necesarias para que se proceda al pago de esas nóminas», aseveró.

Por último, Miguel Sebastián añadió que hay retos de futuro que implican al Gobierno y al sector, «pero lo que no vamos a aceptar es el chantaje de unas empresas», aseguró.

Respecto a la aprobación del Real Decreto y su visto bueno por parte de Bruselas, Sebastián reiteró la postura gubernamental de que se están dando los pasos decisivos en la buena dirección, y achacó «a cuestiones de procedimiento» la lentitud del proceso. No obstante, afirmó que espera que el 29 de septiembre Bruselas ofrezca la solución definitiva, esto es, la aceptación del Real Decreto. En ese sentido, para el ministro se trata de una cuestión clave, ya que garantizó la preocupación del Gobierno por cuanto «apoyamos el carbón porque es nuestra única fuente de energía autóctona, y la necesitamos», dijo.

Respecto a la reunión mantenida con los sindicatos, Miguel Sebastián se mostró satisfecho tanto del tono como de los contenidos tratados, algo que no concordó con la versión dada por los representantes mineros, que, de hecho, ya han convocado una huelga general de cuatro días, durante las jornadas 22 y 23, y 29 y 30 de septiembre. Sí pareció haber quórum en lo relativo a la puesta en común de criterios para elaborar un nuevo plan del carbón a partir de 2012. De hecho, anunció que se creará una mesa de trabajo y que se reunirá la semana que viene.

Pero los sindicatos, en los que a sus intereses respecta, se mostraron cautos ante la promesa de Sebastián de que este mes de septiembre se desbloquearía la aprobación del Real Decreto. Si para el ministro la buena noticia es que «el único procedimiento pendiente es el del Colegio de Comisarios», tal y como adelantó, para los representantes sindicales hasta la fecha, 29 de septiembre, día de la huelga general, les resulta sospechosa. El otro asunto, el de las nóminas pendientes sí quedaron de acuerdo en cuanto a la responsabilidad: Victorino Alonso y Manuel Lamelas.