Los sindicatos exigen la retirada de la reforma laboral para volver al diálogo
Auguran «crispación» si el Ejecutivo actúa por su cuenta en la negociación colectiva
Sindicatos y Gobierno se reunieron ayer por primera vez tras la huelga general del 29-S. Los secretarios de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Gorriz, y de UGT, Toni Ferrer, y la nueva secretaria de Estado de Empleo, María Luz Rodríguez, mantuvieron un encuentro de casi dos horas que, según las dos partes, no sirvió para recuperar el diálogo social y sólo quedó en -œuna primera toma de contacto-. Los representantes de ambas formaciones sindicales enfriaron las expectativas creadas ante el encuentro y coincidieron en darle un carácter simplemente -œinformativo-.
Las distancias se mantienen y para retomar la negociación CC.OO. y UGT exigieron al Ejecutivo que corrija -œlos aspectos más lesivos de la reforma laboral- y dé marcha atrás en la congelación de las pensiones. Además, pidieron que se renuncie a la jubilación a los 67 años. -œConvocamos una huelga general para obtener resultados y todavía no están sobre la mesa. El conflicto abierto el 29 de septiembre sigue abierto-, advirtió Gorriz. Aunque atenderán -œtodas y cada una- de las llamadas del Ministerio de Trabajo e Inmigración, Ferrer indicó que el diálogo social va más allá de -œhacer reuniones-.
El representante de CC.OO. denunció que, cinco meses después de ser aprobada por el Parlamento, la reforma laboral -œno ha reducido la temporalidad y hay más paro-, además agregó que es perfectamente -œreversible-.
La secretaria de Estado de Empleo subrayó que la nueva legislación del mercado de trabajo -œha venido para quedarse-, pero abrió la puerta a una posible modificación, ya que -œel campo de juego no está cerrado y hasta en 19 ocasiones su texto llama a su desarrollo-.
Rodríguez reiteró que el asunto principal del encuentro de ayer -”aunque no el único, según reconoció después-” eran las políticas activas de empleo. No precisó si los sindicatos habían mostrado su disposición a pactar estas medidas, que engloban desde los cursillos de formación a la mediación para la búsqueda de trabajo. E insistió en la importancia de reformarlas para mejorar su eficacia y lograr que los desempleados -œno estén parados-.