Nueva era en Picos de Europa

Un consenso «largo y trabajoso», según reconocieron todas las partes implicadas, hizo posible que ayer se firmara en Madrid, en el Ministerio de Política Territorial y Administración Pública, el acuerdo de traspaso de competencias, por parte del Gobierno central, de la gestión del Parque Nacional Picos de Europa, que pasará a manos de Castilla y León, Principado de Asturias y Cantabria. De esta forma se corroboró lo fraguado en un prolongado proceso en el tiempo, hasta el punto de que es el último parque nacional que pasa a ser de gestión autonómica.

El acto de firma de este acuerdo se celebró en la sede del ministerio que dirige Manuel Chaves, con su presencia, y con la de consejeros de las tres comunidades implicadas. Por parte castellano y leonesa acudieron María Jesús Ruiz, consejera de Medio Ambiente y vicepresidenta primera del gobierno autonómico, y Pilar del Olmo, consejera de Hacienda. Asturias estuvo representada por Ana Rosa Migoya, consejera de Administraciones Públicas y portavoz del Gobierno del Principado. José Vicente Mediavilla, consejero de Presidencia, y Jesús Miguel Oria, consejero de Medio Rural, ambos del Gobierno de Cantabria, representaron a la región santanderina.

El acto celebrado en la capital se escenificó por fases. Cada grupo de representantes de cada comisión autonóma firmó y compareció ante los medios. Primero Castilla y León y después Asturias y Cantabria. Luego intervino el ministro. Por separado y sin foto alguna de familia. Tras esta firma celebrada ayer, el Consejo de Ministros ratificará el acuerdo en su próxima reunión, según fuentes del Ministerio.

Pilar del Olmo, responsable de Hacienda del Gobierno que preside Juan Vicente Herrera, aseguró que «se trata de un buen acuerdo. Un traspaso con coste suficiente para cubrir la gestión del Parque Nacional Picos de Europa», además de afirmar que «comienza un camino ilusionante». Del Olmo también indicó que habrá un periodo transitorio de cesión de competencias hasta el mes de septiembre de 2011.

María Jesús Ruiz, como consejera de Medio Ambiente de Castilla y León, quiso agradecer, como clave, el trabajo previo realizado por Elena Espinosa al frente del Ministerio de Medio Ambiente. Lo hizo para reforzar la idea de «la complejidad de este traspaso, que requería un instrumento de gestión a tres, y que representará el consorcio que se creará», explicó. De igual manera, se formará un patronato en el que estén representados los diferentes sectores de desarrollo y los municipios correspondientes.

Ruiz valoró positivamente que se haya tomado como año horizonte de inversiones el 2009, de forma que el traspaso, que incluye 82 puestos de trabajo, y tiene un coste efectivo de 7,9 millones de euros, «es lo más ventajoso para las tres comunidades autonómicas», matizó Ruiz.

Junto al periodo transitorio, «necesario por operatividad, para finalizar inversiones, reordenar contratos y servicios, entre otras acciones», tal y como señaló la consejera de Medio Ambiente, el 1 de febrero se hará efectiva la titularidad y constitución del consorcio y el patronato, por lo que «desde enero se trabajará en la gestión y el procedimiento de traspaso con parques nacionales», añadió.

Los objetivos de esta nueva etapa que se abre para Picos de Europa, en manos de las comunidades que tienen presencia territorial en el parque, son claros: «Conseguir un mayor desarrollo, gestionar con rapidez y eficiencia, sin menospreciar a parques nacionales, mayor operatividad en el desarrollo socioeconómico de la zona, llevar a cabo planes de inversiones-¦», enumeró, entre otros puntos, la consejera de Medio Ambiente.

Por parte del Gobierno autonómico castellano y leonés también se valoró la eficacia de la reunión mantenida en León y en la que participaron los tres presidentes autonómicos implicados en el Parque Nacional de Picos de Europa.

De esta manera, el futuro de Picos de Europa pasará por el consorcio que se constituirá en febrero y que tendrá como primer presidente al consejero de Cantabria. Después se sorteará quien será el siguiente y, a partir de ese momento, encabezará el consorcio de manera rotatoria y por orden alfabético un representante de cada autonomía.

Respecto a la gestión del parque nacional, cada comunidad que presida el consorcio nombrará al director conservador, habiendo otros dos vicepresidentes por cada comunidad. Unido a esto, el apartado económico se basará en una gestión conjunta, por lo que el Estado desembolsará la cantidad de 7,9 millones anuales.