Los muertos en la carretera bajan por séptimo año, pero a un menor ritmo
El año pasado perdieron la vida 1.730 personas, 173 menos que durante el 2009
El balance de la siniestralidad en las carreteras españolas vuelve a dar una alegría a la Dirección General de Tráfico. Por séptimo año consecutivo, los muertos en la carretera descendieron: de los 1.903 en el 2009 se ha pasado a 1.730, lo que supone una caída del 9,1%. Aunque el dato es bueno, es la caída más baja en el último lustro. Durante el año pasado, se salvaron 173 vidas «entre todos», como recalcó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; una cifra lejana de los 561 del 2008 o los 279 del 2006. El ministro comparó este escaso descenso a las dietas de adelgazamiento. Primero se pierden «muchos kilos» y luego, cuando avanza el tratamiento, «cuesta mucho más» perder peso. «Pero nosotros pretendemos seguir bajando y no mantenernos», indicó el titular de Interior.
Con el balance del ejercicio anterior, se cierra una década en que se ha logrado reducir en un 57,5% los muertos en las carreteras. En el 2001, los muertos en las carreteras superaban los cuatro mil, mientras que los heridos graves casi alcanzaban los 19.000; ahora se han quedado en 7.954, lo que supone una reducción de 10.990 personas. De esta manera, España ha cumplido «con creces» el objetivo de la Unión Europea, que planteó a comienzos de siglo que había que reducir en un 50% los finados en las carreteras. España ha pasado de ocupar el puesto 17 en el 2003 a ser la novena. Ahora, el país tiene 59 muertos por millón de habitantes, mientras que la media europea se sitúa en 69. A la cabeza de esta clasificación están Reino Unido (38 finados por millón de habitantes), Suecia y Países Bajos (39), Alemania y Malta (51), Finlandia (52), Irlanda (54) y Dinamarca (54).
El ministro del Interior, que sólo contestó a preguntas relacionadas con la seguridad vial, desgranó los pormenores de los datos de tráfico. Cada día perdieron la vida una media de 4,7 personas, por 5,2 del 2009 o los seis del 2008. En cuanto al promedio mensual, el año pasado se cerró con 144, cifra que supone catorce fallecidos mensuales menos que en el 2009 (159) y 38 menos que el 2008. A pesar de que la media es buena, Pérez Rubalcaba recalcó que los datos mensuales no son tan importantes, sino que hay que fijarse en «una tendencia» a lo largo del año.