FIN DE LA ERA DEL PRESIDENTE LEONÉS | EL CAMINO A LA SUCESIÓN
Rubalcaba y Chacón, aclamados en sus mítines al grito de presidente
Los dos favoritos para suceder a Zapatero en el PSOE evitan anunciar sus candidaturas
El PSOE comprobó que hay vida después del anuncio de retirada de José Luis Rodríguez Zapatero. Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, los hipotéticos aspirantes a la sucesión, fueron recibidos ayer en Palma de Mallorca y Elche al grito de presidente, presidente, cierto es que el vicepresidente cosechó más vítores. Ninguno mostró sus cartas y dejó a los asistentes a sus mítines con un palmo de narices. Ambos prefirieron enfundarse el traje de faena electoral para ensalzar el paso dado por el presidente del Gobierno y cargar las tintas sobre Mariano Rajoy y el PP.
Todo se ajustó al guión marcado por el líder socialista el sábado -es tiempo de elecciones y no de asuntos internos- y las palabras sucesión o primarias brillaron por su ausencia en los mítines socialistas. Sólo los gritos de presidente, antaño reservados en exclusiva para Zapatero, dirigidos hoy a Rubalcaba y Chacón indicaron que algo que había cambiado. Pero ni por esas; el vicepresidente pidió calma a sus seguidores cuando arreciaron las aclamaciones y la ministra de Defensa se limitó a sonreír.
Era el día de alabar el paso al costado del líder socialista y el vicepresidente afirmó que ante el Comité Federal se vio «al mejor Zapatero», el que de forma «natural, transparente y sin tapujos» dijo que no será el candidato en el 2012. Rubalcaba, al que sus seguidores quieren preservar de unas primarias, elogió, sin embargo, que Zapatero defendiera «a capa y espada» que su sucesor sea elegido de acuerdo a las «normas democráticas» del PSOE, esto es en unas elecciones entre la militancia.
Chacón, emocionada, se declaró «orgullosa» de trabajar con el líder socialista, y subrayó que su decisión de apartarse es «una triple lección, de generosidad, coherencia y democracia». También destacó que el presidente del Gobierno cumplió la palabra dada, aunque fuera para «pena de muchos», ya que «desde el primer día» dejó sentado que «determinados años» al frente de un país son «suficientes». La verdad es que Zapatero nunca dijo en público que iba a gobernar dos mandatos, lo había comentado en privado, pero sin otorgar a ese planteamiento la categoría de compromiso con la sociedad.
Críticas. Hechas las loas al líder del partido, Rubalcaba la emprendió con el PP en su primer mitin de precampaña y acusó al partido opositor de estar obsesionado con el adelanto electoral «no desde hace un mes o dos, sino desde hace ocho años». Se refería a la petición que hizo en ese sentido en la primavera del 2004 el por entonces portavoz parlamentario de los populares, Eduardo Zaplana.
Chacón, por su parte, hizo un discurso plagado de frases con pretensiones ingeniosas. «La esperanza de Rajoy -dijo- es la desesperanza de la gente». Destacó que mientras en el PSOE «todos eligen a uno», en el PP «uno elige a todos»; y ya que estaba en el Comunidad Valencia instó al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, a «dar la talla en el Parlamento, no en los probadores», en clara referencia a los trajes que recibió de la trama Gürtel
Los de Zapatero, el vicepresidente y la ministra no fueron los únicos mítines que protagonizaron los socialistas ayer. El PSOE apretó el acelerador en el primer fin de semana de precampaña y hasta 17 miembros del gobierno y pesos pesados del partido se echaron a la carretera para intervenir en actos por toda la geografía.