«Pido el voto en León aunque sólo sea por defender la sanidad pública»

Dos mensajes nítidos y duras críticas a la gestión de Herrera protagonizaron ayer el discurso del candidato del PSOE a la Presidencia de la Junta, Óscar López. Por un lado, la petición del voto a los leoneses «aunque sólo sea para defender la sanidad pública en Castilla y León» y una encendida defensa del carbón frente al «monumento a la hipocresía mundial»; por otro, los dardos al PP: «Herrera no ha visto un minero en su vida». «Silván se dedica a criticar lo que hacen los demás mientras él no hace nada».

Mostrando su potencial mitinero, López se mostró convencido de que será el próximo inquilino del colegio de la Asunción. «Soy joven. Tengo 38 años y en 2015 tendré 42. Voy a serlo a partir del 22 de mayo, pero los que no han podido esperar son los 60.000 jóvenes que en 10 años se han tenido que ir de Castilla y León por falta de oportunidades».

A partir de ahí, construyó un discurso en torno a dos ideas. La Comunidad que quiere y la que representa el Partido Popular. López advirtió del peligro que corre la sanidad en Castilla y León después del modelo privado que el PP ha implantado ya en Burgos, que puede continuar en otras provincias, según advirtió.

Herrera fue sin duda su fijación con varios pasajes de su intervención. «Dice que Zapatero tiene que explicar los gravísimos incumplimientos con Castilla y León. Yo le digo, el PSOE ha invertido 15.000 millones en 8 años; el PP, 7.000 en los gobiernos de Aznar». Y sobre los debates, sin citarlo, otra crítica más: «No se merece gobernar quien no quiere hablar de su tierra».

El carbón, sin duda, protagonizó la parte más crítica de su discurso. Ante un grupo de mineros de Torre del Bierzo en primera fila, ataviados con el traje de faena, López aseguró que, igual que se ha logrado alargar su supervivencia hasta 2018, se terminará avanzando porque el sector «es estratégico para España, para León y para Palencia», insistió en uno de los momentos en los que fue más aclamado.

Después del accidente nuclear de Japón, el PP ha cambiado de posición, según López, aunque el consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, dijera recientemente que «una central nuclear era más segura que el salón de su casa». «Me dan vergüenza estas declaraciones», afirmó. Y otra más, esta vez a Herrera, por el recurso presentado por la Xunta de Galicia: «Ha callado cobardemente».

El PSOE, en cambio, cree que las dudas sobre la energía nuclear son una oportunidad para el carbón. «Hemos estado con los mineros y algunos nos pitaron pero a quien no han pitado es a Herrera porque no ha visto un minero ni ha defendido a un minero en su vida», añadió. Y todavía dijo más: «En estas elecciones autonómicas unos defienden la energía nuclear y el mantenimiento de Garoña y otros defendemos el futuro del carbón y renovables en esta Comunidad».

En esa parte de su discurso centrada en las propuestas de su partido, López insistió también en que hay muchas competencias que son de la Junta. «Su mayor fracaso es la despoblación del medio rural». «Tengo una receta mágica contra la despoblación para evitar que se marchen jóvenes es que se vayan antes ellos (la Junta)», sostuvo, para explicar que el 22-M los ciudadanos se juegan asuntos como «la sanidad, la educación, los servicios sociales, dos terceras partes de las infraestructuras». Por eso, añadió, «merece la pena este reto porque se puede conseguir y hay que creer en ello, porque para ganar hay que merecerlo y trabajarlo». «El que siembra recoge y estamos sembrando en esta tierra que lleva 24 años sin tener oportunidades», fue otra de sus frases.

Con Zapatero delante, López también defendió al PSOE en un momento que no es fácil. Según dijo, es el partido que «ha garantizado el Estado del Bienestar, que tiene 130 años de historia, que ha gobernado todas las comunidades y que ha metido a este país en Europa y en el G20». «El PP», dijo a modo de conclusión, «presenta 800 propuestas, 800 incumplimientos en 26 años. Vuelven a llevar el plan regional de aeropuertos de 2007. Aunque no lo digan, por los aeropuertos sólo ha apostado el Gobierno de España».