Mueren dos mujeres en Almería y Madrid a manos de sus parejas
La disputa por la comunión de la hija provocó el primer crimen
Dos mujeres perdieron ayer la vida en nuevos episodios de violencia doméstica en Almería y horas después en Madrid.
En el crimen ocurrido en la ciudad andaluza, la mujer asesinada presuntamente a manos de su pareja, recibió veinte puñaladas, según informaron fuentes municipales en un comunicado. La víctima tenía 30 años y el presunto agresor 45, y estaban en proceso de separación. Ambos tenían dos hijos de 5 y 7 años.
El crimen ocurrió pasadas las 10.30 horas en la calle Vinaroz, en el barrio de El Zapillo, a unos 300 metros del domicilio de la víctima, A.E.N., que no había presentado denuncia previa por malos tratos, según la Subdelegación del Gobierno.
Según algunos vecinos de la zona, el agresor, V.F.C., estaba esperando a la víctima en la calle porque sabía que la mujer sacaba al perro a pasear todas las mañanas. El hombre había dejado el domicilio familiar hace un mes.
La policía detuvo al presunto agresor, que estaba en un banco esperando su arresto después de que varias personas impidieran su huida, según testigos presenciales. La pareja había discutido a causa de la comunión de la hija mayor, según dijo a los agentes el propio detenido.
Horas después, una mujer falleció ayer degollada en su domicilio del distrito de Puente de Vallecas, en Madrid, y la policía encontró en el interior de la vivienda a su pareja, que está muy grave, también con un corte en el cuello, según fuentes de Emergencias Madrid.
Los bomberos y los agentes de Policía, que accedieron al interior de la vivienda tras forzarla, encontraron en su interior a la pareja de la víctima que, según las primeras informaciones, intentó quitarse la vida con un arma blanca.
Hacia las 16,45 horas un vecino de la finca llamó a la policía después de escuchar a través de la ventana fuertes voces de una mujer y un hombre que parecían discutir.
En el interior de la vivienda, en el salón, localizaron el cadáver de una mujer, que presentaba una herida penetrante de arma blanca, con sección de la tráquea y vasos sanguíneos vitales. En las proximidades estaba el cuerpo de un hombre, en estado semiinconsciente.