Interior acerca a cinco presos de ETA
El Ministerio del Interior ha retomado en las últimas semanas el traslado selectivo de internos de ETA para debilitar el frente carcelario de la banda, estrategia que aparecía haber relajado en lo que va de año. Entre los movimientos de los dos últimos meses destaca el envío de tres presos a cárceles del País Vasco y el acercamiento a centros más próximos a Euskadi de dos etarras, uno de ellos, uno de los asesinos de Fernando Buesa. El primero de los acercados al País Vasco es José Ángel Biguri Camino, condenado a 51 años en 1991 por un atentado contra el cuartel de Llodio, en 1988, en el que resultaron heridos siete guardias civiles. Biguri, que no se ha desvinculado de la banda y que en aplicación de la doctrina Parot no saldrá de la cárcel hasta 2019, fue trasladado a Martutene en San Sebastián
Según fuentes penitenciarias, su traslado se ha debido a razones humanitarias por su estado de salud. Al centro alavés de Nanclares de Oca, donde Interior concentra a los etarras más conocidos que han roto con la disciplina de ETA, ha sido llevado Andoni Díaz Urrutia, al igual que Miren Gotzone López de Luzuriaga, condenada a más de cien años por varios crímenes ha sido llevada a Martutene.