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Dos mujeres se disputan la herencia de Marcelino Iglesias
Dos mujeres, la socialista Eva Almunia, y la popular Luisa Fernanda Rudi, se disputan la presidencia de Aragón, tras la renuncia del actual presidente, Marcelino Iglesias, a presentarse a la reelección después de tres mandatos de gobierno en coalición con el PAR.
Desde que se celebraron las primeras elecciones autonómicas en 1983, nunca un partido ha obtenido en Aragón la mayoría absoluta y en estos comicios parece, según las encuestas, que tampoco la habrá, con lo que los pactos volverán a ser determinantes en la formación del Gobierno del la Comunidad.
El PP, según algunos sondeos, podría volver a ser la fuerza más votada, tras dos legislaturas en las que quedó por detrás del PSOE, pero necesitará el apoyo del PAR para poder acceder a la presidencia. El líder de los regionalistas, José Ángel Biel, ha avanzado que no formará parte del Ejecutivo si no obtiene ocho diputados por lo menos —tiene actualmente nueve—.
Los socialistas podrían igualmente ser los más votados, aunque perderían varios diputados según los sondeos, y se verían igualmente abocados a trenzar una difícil política de pactos para conservar la presidencia del Gobierno.
La coalición con el PAR se ha resentido en el último año por desacuerdos importantes sobre la financiación o la ley de lenguas, por lo que los socialistas pueden tener la opción de pactar con CHA —con otra mujer al frente— e IU, según los escaños que logren.
Chunta Aragonesista presenta como candidata a su presidenta, Nieves Ibeas, tras un proceso de renovación en el que han sido sustituidos los líderes que fundaron la formación nacionalista en 1986, mientras que IU concurre con Adolfo Barrena por tercera vez.
La legislatura, que casi empezó con la inauguración de la Expo Internacional de Zaragoza del 2008, ha acabado al ralentí, a juicio de la oposición, que ha criticado la falta de iniciativas del Gobierno ante la crisis económica y el aumento del paro, una situación en la que se encuentran más 115.000 aragoneses, según la última EPA.
El protagonismo político ha recaído en el presidente Marcelino Iglesias, quien de forma sorprendente anunció hace tres años que no volvería a presentarse a las elecciones y que quería pasar a un segundo plano, para después, hace unos meses, aceptar la Secretaria de Organización del PSOE a propuesta de Rodríguez Zapatero.