«La reducción de cargos de confianza es una de las medidas que estoy estudiando»

—F. R. ¿No teme en convertirse sólo en el desfacedor de entuertos del anterior alcalde? Rebaja del IBI, cambiar Fernández Ladreda, retirada del parque Pocoyó...

—Emilio Gutiérrez. No, porque el alcalde cambió también una situación anterior. El parque Pocoyó, por ejemplo, estaba en una demarcación distinta del paseo más emblemático de nuestra ciudad. ¿Eso se entiende como un desfacedor de entuertos del alcalde anterior? Yo no lo entiendo así. Creo que fue un error lo de Papalaguinda y creo que lo mismo lo piensan la mayoría de los leoneses. Cerraron el paseo y anunciaron una gran obra, estuvo cerrado muchos meses y cuando se abrió, para mí y lo digo como un ciudadano más, fue la gran decepción. ¿En qué cabeza cabe colocar 50 metros de un parque infantil en medio del paseo por donde pasan los coches?. ¿Fernández Ladreda?, pero si es que la inmensa mayoría de los ciudadanos están en contra de lo que se ha hecho.

—P. L. Esto lo que hace entender es el creciente descrédito de la clase política, porque el ciudadano, que también gestiona un hogar, una familia, difícilmente entiende, por hacer el paralelismo, que hoy se ponga un tabique para luego poner otro. Todo el dinero que se derrocha no sólo en esta ciudad, en todo el país.

—Emilio Gutiérrez. Totalmente de acuerdo. Cuando yo me reuní con los de Fernández Ladreda les dije claramente que no sabía si habría dinero para hacer ese cambio cuando llegara al Ayuntamiento y ellos me dijeron que se podría hacer con poco dinero. Y es verdad. Habrá que hacer cosas no a lo grande, porque hoy todos somos más pobres, todos. Pero estamos para hacerles más fácil la vida a los ciudadanos, no para complicársela y en Fernández Ladreda se le ha complicado mucho.

—P. L. Pero habrá cosas que no pueda hacer porque ese dinero lo requiera para hacer obras en otro lugar. El parque Pocoyó ha costado cerca de 500.000 euros y, si ahora se elimina, posiblemente sea la obra más costosa de toda la provicia y de este país y a lo mejor usted necesita ese dinero para otras iniciativas. ¿No tendrá que demorar tal vez esas actuaciones?

—Emilio Gutiérrez. No digo que no tenga que planificar, tal vez tenga que planificar todas esas cosas, pero por eso he dicho que el tema de programar las inversiones es importantísimo. Cuando decimos que no hay dinero y se me dice que el parque Pocoyó ha costado esa cantidad, pues yo no lo habría hecho. Así de claro. Y Fernández Ladreda, tampoco lo habría hecho. Es un tema de priorizar.—P. L. Dicen que los últimos alcaldes de León han perdido la Alcaldía porque se han alejado de la ciudad, que la ganaron acercándose a la ciudad y la perdieron alejándose. Son los casos de Mario Amilivia y Francisco Fernández. Y dicen que tiene mucho que ver, no sé si es un síndrome como el de La Moncloa, con el de la planta séptima. ¿Cambiará usted la planta séptima, esa especie de torreón de castillo infranqueable para la ciudadanía?

—Emilio Gutiérrez. Espero no adquirir ese síndrome.

—P. L. Eso dicen todos.

—Emilio Gutiérrez. Bueno, eso dicen todos, pero unos hacen todo lo posible para caer en el síndrome y otros hacemos lo posible para, precisamente, evitarlo.

—P. L. ¿Dedicará tiempo a la semana, incuso al día, para atender al ciudadano de a pié que acuda a pedir cita con usted?

—Emilio Gutiérrez. Sin duda alguna. Será una de mis medidas prioritarias e inmediatas, que ya me comprometo a adelantar aquí que se va a percibir por los ciudadanos en cuanto llegue al Ayuntamiento. Voy a estar disposición de los ciudadanos y tendré un día a la semana para ellos. El acceso al despacho del alcalde no va a ser tan complicado como es ahora. La proximidad al ciudadano del alcalde va a ser una prioridad. Los ciudadanos lo van a percibir de inmediato. Además, lo van a percibir dentro y fuera del Ayuntamiento.

—P. L. Es decir, se le va a ver a usted en la calle.

—Emilio Gutiérrez. Se me va a ver en la calle.

—P. L. Pero no al principio.

—Emilio Gutiérrez. Al principio, al medio y al final.

—F. R. Y en los barrios.

—Emilio Gutiérrez. Y en los barrios. Yo empecé la campaña en un barrio y la terminé en un barrio. Y la pegada de carteles e hizo en un barrio. La ciudad es la suma de... los barrios.

—L. U. ¿Tiene claro cómo va a administrar esa cantidad de avales que le ha dado nunca León a un alcalde?

—Emilio Gutiérrez. Sí, con tres palabras: con toda mi gratitud, con toda la ilusión del mundo y con toda la responsabilidad.

—P. L. ¿Y nada de humildad?

—Emilio Gutiérrez. Humidad está toda en la gratitud. Gratitud guión humildad, en este caso, va parejo.

—L. U. ¿Tiene claro cómo trasladar a la ciudad las diferencias con la gestión que se está llevando ahora en el municipio? ¿Tiene idea de lo que quiere cambiar?

—Emilio Gutiérrez. Para nosotros es prioritario mejorar la imagen de la ciudad. Nuestro proyecto gravita sobre tres grandes ejes: mejorar la imagen de la ciudad, el bienestar de los leoneses y un proyecto para que ayude a crear empleo. ¿A través de quién? Pues auxiliando al emprendedor, al pequeño industrial, al pequeño comerciante, a la pequeña y mediana empresa. Y todos confluyen en uno de los tres que he dicho, que es el bienestar. Si tú tienes una ciudad agradable y empleo adquieres un mayor bienestar. Las políticas sociales son muy importantes para nosotros.

—P. L. ¿Imagino que el Ayuntamiento volverá a ir de la mano con Diputación en materia turística? Que es lo que además manda el sentido común, por una cuestión de austeridad y de eficacia, porque es difícil entender que haya en una feria dos pabellones de una misma provincia compitiendo entre sí. Entiendo que se acabó la aventura de la sociedad mixta, que no está claro para que ha servido a parte de para gastar dinero, aunque tampoco se sabe cuánto, y volverá a ir de la mano de la Diputación.

—Emilio Gutiérrez. Sí volveremos a ir de la mano de la Diputación o ellos de la mano nuestra y de la mano también de la Junta y del Gobierno central. El turismo es una suma de todos los poderes y de todas las fuerzas. Tenemos que sumar todos los esfuerzos, el de los hosteleros también, para conseguir los retos que nos proponemos.

—F. R. ¿Ya le ha explicado a Isabel Carrasco cómo le va a pagar los más de dos millones que debe el Ayuntamiento?

—Emilio Gutiérrez. Pues no hemos hablado de cómo vamos a pagar.

—F. R. Sabe que se lo va a reclamar.

—Emilio Gutiérrez. Bueno, ya nos sentaremos y ya hablaremos. La buena relación entre todas las administraciones va a guiar nuestros comportamientos, lo que no quiere decir que cada uno no esté en su sitio y defienda a la institución que representa. En este caso, yo defenderé al Ayuntamiento de León.

—P. L. ¿Necesitará recordarle a Isabel Carrasco que prometió que ella sólo sería un número en el Ayuntamiento y acudiría a levantar la mano al pleno y nada más?

—Emilio Gutiérrez. No. Yo no tengo que recordarle nada a Isabel, porque ella sabe muy bien lo que tiene que hacer en todo momento.

—F. R. Siempre puede pedirle consejo a Marcos Martínez, que la ha tenido controlada en Cuadros.

—Emilio Gutiérrez. Pues nunca le he preguntado.

—F. R. Hablaba usted antes de tres ejes de su mandato. Mejorar la imagen de la ciudad, muy bonito; el bienestar de los ciudadanos, espléndido; y crear empleo, maravilloso. ¿Explique, por favor, cómo desde el Ayuntamiento puede crear empleo? Y le recuerdo una de las cuestiones sobre las que usted ha basado su campaña: potenciar el parque tecnológico para atraer empreas. ¿Cómo va a conseguir atraer empresas al parque tecnológico sino lo ha conseguido la Junta en todos estos años?

—Emilio Gutiérrez. Si no lo ha conseguido la Junta, no hombre, alguna ha venido.

—F. R. Sí. Proconsi, de León. Syva, de León, salvo HP...

—Emilio Gutiérrez. Bueno, pero bien, bien. No vamos a decir que no es así, porque no es verdad. Lo que he dicho, y lo sigo diciendo, es que en este momento la preocupación principal de las personas es el empleo, de todas, también la nuestra. Se pueden hacer cosas para que las empresas se instalen. Si en el muncipio de al lado existen beneficios fiscales para que las empresas se instalen y en el tuyo no, pues seguro que el empresario puede optar por ir al municipio del al lado y no al tuyo.

—F. R. ¿Va a bajar usted los impuestos a las empresas para que se instalen en León?

—Emilio Gutiérrez. Por qué no. Es algo que se ha hecho siempre. Yo he sido alcalde de Cistierna y allí ha habido bonificaciones fiscales para las empresas que se instalaron en el polígono de Vidanes. Y yo sé cómo cogí el polígono de Vidanes y cómo estaba cuando terminé mi mandato y eso es constatable. También se pueden tomar medidas de simplicación administrativa, que es algo de lo que las empresas se quejan. Queremos generar ilusión y confianza en el pequeño y mediano empresario, que es lo que tenemos aquí y son los que nos van a hacer salir de la situación en la que estos momentos estamos.

—P. L. Desde esta institución se requiere un carácter reivindicativo. Supongo que usted que ha sido diligente durante muchos años con la Junta no se convertirá en un alcalde sumiso. Porque al que le va bien en esta Comunidad es que al que ha sido reinvidicativo con la Junta, sin ser un descerebrado, pero sí con un carácter reivindicativo. La prueba la tiene con su compañero de partido el alcalde de Valladolid, que le va bastante bien.

—Emilio Gutiérrez. Ya lo he dicho muchas veces. Voy a defender con uñas y dientes los intereses de León y de los leoneses.

—R. B. Usted defiende la integración de Feve, pero no el tranvía. León de la Riva acaba de anunciar que una de sus prioridades en este mandato, que no pudo ejecutar en el anterior, será un tranvía. ¿Cómo se explica que un mismo partido adopte dos posturas tan distintas en una ciudad y otra?

—Emilio Gutiérrez. Una persona recibe un tratamiento médico y otra no. ¿La ciudad de Valladolid es la misma que la ciudad que la ciudad de León? Pues no. Yo ni valoro ni me miro en el espejo del alcalde de Valladolid. Digo, y está escrito en nuestro programa, que no estamos a favor del tranvía y lo hemos dicho muy claro. Y los leoneses, con su voto, han dicho que no quiere el tranvía para León. Sí es absolutamente necesario mejorar y completar el plan de movilidad y potenciar nuestra red de transporte público, porque no está ajustado a la realidad.

—P. L. Entiendo que una de las primeras citas que usted solicite será con el Gobierno, porque hay un plan muy beneficioso para la ciudad que es la integración de Feve que, si no ha cambiado nada, en julio como dijo su presidente Villalba saldrá a licitación...

—Emilio Gutiérrez. Sin duda alguna. En las primeras semanas voy a solicitar una entrevista al presidente del Gobierno de España.

—P. L. ¿Al presidente del Gobierno?

—Emilio Gutiérrez. Y también, al presidente de la Junta de Castilla y León.

—P. L. ¿Pero a cuál? No tarde mucho.

—Emilio Gutiérrez. Yo hablo del presidente del Gobierno.

—P. L. ¿Y para qué?

—Emilio Gutiérrez. Hay una serie de infraestructuras que hay que impulsar y cumplir unos compromisos que hay con León y que, en estos momentos, están adormecidos.

—P. L. Estoy convencido que le recibirá gustoso.

—Emilio Gutiérrez. Muy bien.

—F. R. ¿Habla de la León-Valladolid?

—Emilio Gutiérrez. Por ejemplo. Es una de ellas, claro que sí.

—F. R. ¿Mantendrá ese carácter reivindicativo para que se ejecuten las inversiones que ya están en marcha? AVE, Palacio de Congresos, Feve...

—Emilio Gutiérrez. Por supuesto que sí.

—F. R. ¿Cómo va a conseguir que el presidente de la Junta dé su brazo a torcer y traiga para León la Facultad de Medicina?

—Emilio Gutiérrez. Vamos a ver. En este tema cada uno quiere decir lo que quiere decir. Lo que yo he dicho, esté escrito lo que esté escrito.

—P. L. Esto me recuerda a la parte contratante de la primera parte.

—Emilio Gutiérrez. Yo he dicho lo que he dicho en todo momento y lo he explicado muchas veces, Felipe, y a ti te lo he explicado también. Yo mantengo una reunión con el rector y a mí explica cuál es su plan. Todo el mundo habla de Medicina, pero él ha presentado la demanda de tres estudios...

—F. R. Sí, pero entre ellos Medicina y usted ha dicho que la va a apoyar.

—Emilio Gutiérrez. Y lo apoyo.

—F. R. Permítame que insista: ¿Cómo va a conseguir que la Junta dé su brazo a torcer?

—Emilio Gutiérrez. Yo voy a apoyar al rector y lo voy a apoyar, Felipe. Ahora, ¿quién tiene la competencia para solicitarlo? El que lo ha hecho. ¿Quién es? El rector. ¿Qué procedimiento administrativo sigue esto? El rector participa de este procedimiento y yo lo que digo es que voy a apoyar al rector. Todo lo demás, cada uno puede decir lo que quiera y lo que le dé la gana y puede interpretar las palabras, pero eso será su problema. Yo he dicho lo que he dicho y no me muevo de ahí.

—F. R. Pero al rector, quizás, lo que le gustaría es que usted hablara con Herrera y con Mateos, que todavía sigue siendo su jefe, y les dijera que cambiarán de opinión.

—Emilio Gutiérrez. Pero a mí el rector no me ha pedido que haga esto. En ningún momento me ha pedido el rector que yo vaya a hablar con Herrera de Medicina, Criminología o de Telecomunicaciones. Es que no me lo ha pedido.

—F. R. Pero usted tiene iniciativa ¿o necesita que se lo pidan?

—Emilio Gutiérrez. Sí, sí yo tengo iniciativa, pero yo no tengo iniciativa para asumir las competencias que pueda tener otra persona. ¿Tengo yo iniciativa para demandar unas enseñanzas para la Universidad de León?

—F. R. Bien, pero insisto usted puede pedirla y exigirla.

—Emilio Gutiérrez. Yo lo que digo es que apoyo la iniciativa del rector. Y ahí estamos.

—P. L. ¿Podemos concretar de qué quiere usted hablar con el presidente del Gobierno?

—Emilio Gutiérrez. Pues de los compromisos que hay en León y que, en este momento, están parados o llevando un ritmo excesivamente lento, porque no se han cumplido los plazos del propio Gobierno.

—P. L. Permítame, pero en esa afirmación hay no sé si cierto cinismo, pero sí cierta injusticia porque la austeridad es para todo el mundo.

—Emilio Gutiérrez. La austeridad es para todo el mundo, pero hay que priorizar.

—P. L. También la Junta tenía a principio de mandato una serie de compromisos con determinadas infraestructuras que, evidentemente, le ha venido sobrevenida la crisis.

—Emilio Gutiérrez. ¿Cómo cuáles?

—P. L. ¿De la Junta?

—Emilio Gutiérrez. Sí, sí. ¿Cúales?

—P. L. La continuidad de la León-Braganza...

—Emilio Gutiérrez. Bueno, ya están con sus estudios y demás. La Alta Velocidad ya tendría que haber llegado...

—P. L. Perdone, León no quiere estudios lo que quiere son obras.

—Emilio Gutiérrez. No, claro, pero la León-Valladolid, que tendría que estar inaugurada, la vía rápida Cistierna-Mansilla, La Robla-León, en la León-Braganza, el Gobierno tiene mucho que decir...

—P. L. León es la cuarta provincia del país en inversión ferroviaria con el Gobierno de Zapatero.

—Emilio Gutiérrez. Sí, sí, sí.

—P. L. ¿Le parece a usted poco que en León vaya a llegar el AVE el año que viene?

—Emilio Gutiérrez. Me parece que no se han cumplido los compromisos con León y me parece que, incluso, que la obra que se ha hecho de una estación provisional, la entrada de unos trenes que no son alta velocidad, que los trenes tienen que entrar con un tope... Me parece que no es así como todo esto estaba programado.

—P. L. Pregúntele usted a Santander, a La Coruña, a Vigo, que no van a soñar ni con el AVE en muchos años. Pregúnteles.

—Emilio Gutiérrez. Que no, que no, que yo no me guío por otras ciudades, que yo estoy en León y de lo que me preocupo de lo mejor para los leoneses. En Santander se preocupará su alcalde y su equipo de Gobierno y en Guadalajara, también, y en Oviedo y en Valladolid. Yo tengo bastante con la preocupación y los compromisos que no se han llevado a cabo con León. Eso es lo que tengo que seguir reivindicando.

—P. L. ¿Por qué no le propone usted a la Junta que cofinancie la León-Valladolid? Son propuestas que ha hecho la Junta en otras provincias.

—Emilio Gutiérrez. Pues porque es algo que ya tenía que estar terminada. Eso sería al principio, cuando se hizo el diseño de las infraestructuras de esta Comunidad.

—P. L. Aún se está a tiempo.

—Emilio Gutiérrez. No, no. Vamos a ver. No estamos a tiempo porque, precisamente, no se ha hecho. Esa infraestructura tenía que estar ya ejecutada. Llevo cuatro años yendo a Valladolid, sé lo que se dijo se prometió, sé al ritmo que se ha llevado y sé lo que se está haciendo ahora porque todavía pasé hace dos días por ahí.

—P. L. Ya sabemos que a Zapatero le va a pedir usted la luna y a Herrera, ¿qué le va a pedir?

—Emilio Gutiérrez. Pues lo mismo, que cumpla con León y con todas las necesidades que tiene León.

—P. L. Concrételo.

—Emilio Gutiérrez. Ya lo concretaremos en su día. Ya se verá.

—P. L. Ya que no le va a pedir la luna, alguna estrella le pedirá.

—Emilio Gutiérrez. Es obvio que los incumplimientos del Gobierno central con León son absolutamente manifiestos. Anunciados aquí a bombo y platillo en el 2004 y en el 2008. En el Plan del Oeste y en el Consejo de Ministros del Parador y que se si hubieran llevado a cabo la situación de León sería muy distinta.

—P. L. Una de las infraestructuras comprometida por la Junta para León es el Conservatorio de Música, que dademás pertenece a su consejería, y tampoco se ha cumplido.

—Emilio Gutiérrez. Pero hay que saber el porqué. ¿Se ha puesto a disposición de la consejería la parcela?

—F. R. Sí.

—Emilio Gutiérrez. No. Hay tres aspectos: el de la luz, un vial hacia la parcela, creo que de dos kilómetros, y las catas arqueológicas, porque lo que no puedes es ponerte a construir en el Conservatorio y que pase como con el puente de La Lastra.