López ofrece colaboración a Herrera pero con planes concretos y no vacíos
El socialista le ofrece un «gobierno de concentración» por el empleo y el bienestar
Humildad. Esta fue la palabra elegida para comenzar y finalizar su intervención en el debate de investidura Óscar López, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista. Humildad por los miembros parlamentarios socialistas que sienten orgullo, responsabilidad y compromiso de representar a sus votantes en la Cámara. Y un compromiso que trató de manifestar en diversas ocasiones hacia el grupo popular, que traducido en palabras supone apoyar al presidente popular Juan Vicente Herrera en todo lo que haga para generar empleo, o garantizar el mantenimiento o la ampliación del estado de bienestar, de manera que garanticen los servicios públicos de calidad. Si esto es así, López manifestó el apoyo de todos los miembros socialistas en el Parlamento. Ahora bien, el portavoz de la oposición expresó claramente que su grupo no va a firmar ningún pacto que no tenga un diagnóstico certero, que conlleve objetivos claros, con unas medidas concretas, una financiación suficiente y una evaluación transparente con un establecimiento de marcadores que se puedan analizar de manera periódica.
Fin de acuerdos vacíos. López le pidió más autocrítica en su discurso y rechazó firmar acuerdos vacíos. A su vez apuntó la necesidad de que finalicen los planes, las agendas, las estrategias, las mesas y los acuerdos si no se van a obtener resultados concretos. Criticó a su vez que Herrera anunciara planes similares a los de 2001, 2003 y 2007, «ya sabe que la hemeroteca es terrible» bromeó. «Es necesario que dejemos de hacernos trampas en solitario», apuntó López y anunció que si Herrera apuesta por la creación de empleo, la recuperación económica y la garantía del estado de bienestar «sepa que va usted a trabajar como si tuviera un gobierno de concentración». A lo que le llevó a Herrera en la réplica a bromear denominándolo como «el vicepresidente en la sombra del Gobierno de concentración». Finalmente López remarcó que su intención con su «gobierno de concentración» es que Herrera tenga claro el apoyo unánime del grupo socialista, «como ya ocurrió en el pasado más inmediato» donde le recordó su apoyo en cuestiones «espinosas» de la anterior legislatura.
El resto de las propuestas manifestadas por Herrera en su discurso de investidura están supeditadas a garantizar el estado de bienestar ya que de lo contrario López expresó que «nos van a encontrar enfrente, con contundencia, en todo lo que suponga un retroceso de derechos y también de libertades».
Agenda de la Población. Las mayores diferencias mostradas por López y Herrera fueron las referidas al diálogo social, el déficit con el que cuenta Castilla y León y de los ayuntamientos unido a la nueva ordenación del territorio, a lo que López calificó como «tratamiento bipolar con años negando el problema pero años haciendo anuncios vacíos». En relación a los pactos planteados por Herrera sobre de la Agenda de la Población, propuesta desestimada por el grupo socialista el pasado año, López expresó su intención de votar sí, pero con un pacto ligado a la evaluación y unido con los agentes sociales, a lo que el candidato replicó que los agentes sociales evalúan cada plan que elabora la Junta.