¿El 5 de octubre, día D?
Zapatero deberá disolver las Cortes antes de San Froilán si adelanta las elecciones al 27 de noviembre
Si las elecciones generales se adelantan al 27 de noviembre como defienden numerosos dirigentes en el PSOE, Zapatero debería disolver las Cortes y convocar los comicios el 5 de octubre -”día de San Froilán, festivo en León-” para cumplir el plazo legal de 54 días entre la disolución y la cita con las urnas. Si fuera así, algo que hoy nadie sabe a ciencia cierta ni siquiera Zapatero y Rubalcaba, implicaría que no habría Presupuestos para el 2012 ya que el debate de las enmiendas a la totalidad sobre las cuentas del próximo año tiene que realizarse en octubre y para entonces el Congreso estaría cerrado.
Ahorrarse ese trámite no es cosa menor para el Gobierno porque las exigencias de los potenciales aliados presupuestarios, en concreto el PNV, volverían a poner en una situación incómoda al Ejecutivo que estaría obligado a hacer concesiones fáciles de atacar desde la oposición. Esas hipotéticas transacciones tampoco serían recibidas con entusiasmo por los socialistas vascos, que verían una vez más que los nacionalistas, en la oposición en el País Vasco, se convertían en interlocutor del Gobierno central para asuntos de interés general con el Ejecutivo de Vitoria de convidado de piedra.
Para el 5 de octubre, además, las reformas que el Gobierno cree inaplazables estarían aprobadas. Este mes, recibirán la luz verde en el Senado y en el Congreso la reforma de las pensiones, la segunda parte de la reforma laboral referida a las políticas activas de empleo y para septiembre quedaría la reforma de la negociación colectiva, aunque en este caso ni siquiera haría falta porque dado que se aprobaron por decreto la disolución de las Cortes no paralizaría su ejecución. Es decir que para esa fecha la parte nuclear del calendario legislativo estaría solventado, aunque en el camino se perderían leyes como la de igualdad de trato o la de muerte digna.