Elena Salgado llevará el timón cuando falteel presidente
Elena Salgado es la nueva número dos del Gobierno más por movimiento del escalafón que por una decisión política. Se convierte en el más alto cargo del Ejecutivo, después de Zapatero, porque el que ocupaba ese lugar, el vicepresidente primero, ya no está en la Moncloa. Pero ella no va a ser el vicepresidente primero, con el que le une una vieja amistad. Desempeñará las mismas funciones que tiene ahora, con una salvedad, presidirá la reunión del Consejo de Ministros en ausencia del presidente del Gobierno. «Será un honor», admitió ayer.
La vicepresidenta no reemplazará a Rubalcaba en sus labores. La comisión de subsecretarios que prepara todas las semanas la reunión del gabinete de los viernes, por ejemplo, será presidida, con toda probabilidad, por el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, que ya ha desempeñado esta función cuando Rubalcaba no lo hacía.
Zapatero, sin embargo, ha lanzado un mensaje a los mercados financieros internacionales avalando a Salgado.