Casi diez años sin ningún bebé
? Los pueblos se mueren, dicen algunos, y esto es sin duda cierto en unos más que en otros. La mayoría lleva años viendo descender su población, pero aún aguantan; otros, los cercanos a las principales ciudades de la provincia: León y Ponferrada, han incluso aumentado sus habitantes.
Pero sin duda es cierto que un pueblo se muere si sus habitantes también lo hacen y no hay otros para sustituirlos. Así ocurre en algunos municipios leoneses, cuyas esperanzas de mantener población son prácticamente nulas.
Los casos más extremos son los de los municipios de Castrillo de Cabrera y Santa María del Monte de Cea, los dos únicos de la provincia que llevaban una década sin registrar ni un solo nacimiento. Desde 2001 ningún bebé ha despertado con su llanto a sus vecinos, que ven cómo su población está cada vez más envejecida.
Castrillo de la Cabrera es el municipio leonés que ha decidido romper la estadística este año. José Antonio Blanco Acebedo es el nombre del niño que nació el pasado 24 de noviembre en Castrillo, donde después de una década los vecinos han vuelto a escuchar a un bebe llorar. Su madre, Florinda, es de Santo Domingo; su padre, Antonio, sin embargo, es nativo del pueblo de Odollo de la comarca de la Cabrera. Ambos son la razón por la cual, por fin después de más de diez años, los vecinos de la localidad han vuelto a ver un niño recién nacido por las calles del municipio. Antonio ha sido alcalde del municipio durante cuatro años, pero en total han sido diecisiete los que ha estado dedicándose a la política. A pesar de que hace casi una década que dejó de estar el gobierno, Antonio afirma que «ya por entonces tampoco nacía nadie». «Los pueblos se mueren y lo que esta ocurriendo con la población hoy en día ya no tiene nombre», comenta Antonio, «no hay repoblación». Además, Antonio asegura que «ya sólo quedan cuatro personas mayores en los pueblos de León», y que «si seguimos así, dentro de veinte años ya no vivirá nadie aquí».
Y es que no están mucho mejor los ayuntamientos de Castilfalé, Escobar de Campos, Fuentes de Carbajal, Gusendos de los Oteros y Prado de la Guzpeña, en los que sólo se ha registrado un bebé nacido en la última década.
Ampliando la lista, hay que destacar que son 65 los municipios leoneses que en los últimos diez años han registrado menos de diez nacimientos. Entre los más ?pobres? en bebés están Cebanico, Oencia, Pajares de los Oteros, Reyero, San Adrián del Valle, Santa Cristina de Valmadrigal y Valdesamario, que sólo llegan a los dos nacimientos en una década.
En cifras absolutas, los municipios con mayor número de nacimientos siguen siendo León, Ponferrada y San Andrés.
Viendo el panorama, es comprensible que los habitantes de Castrillo están tan ilusionados con la llegada del nuevo bebé; un niño con el que, quizás, se empiece a dar la vuelta a las estadísticas.