España se gastará 60 millones en Afganistán hasta la salida de las tropas
El objetivo es que las empresas y personal afgano lideren las reconstrucciones
El Gobierno tiene comprometidos 60 millones de euros para la reconstrucción de Afganistán hasta que comience la salida de los primeros militares del país, en el primer semestre del próximo año. El dinero irá destinado a la ejecución de proyectos de desarrollo y al programa de reinserción de insurgentes en la provincia de Badghis, que se encuentra bajo responsabilidad española.
Este gasto es casi más del doble que la inversión media anual de España en ese país. Para el Ejecutivo, este esfuerzo económico demuestra su compromiso con la misión afgana y con alguno de sus principales objetivos: el desarrollo provincial, el fortalecimiento institucional y la ayuda humanitaria.
Los programas de desarrollo fueron aprobados en la Conferencia de Londres del 2006 y desde entonces España ha gastado 160 millones de euros a través del equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) de Badghis. A diferencia de otros aliados, en este PRT colaboran personal civil y militar. Más de 105 millones han sido destinados a proyectos ejecutados con organismos multilaterales (ONU o Banco Mundial) y 55 millones a través de acuerdos bilaterales con el Gobierno afgano. Pese a ser el décimo contribuyente en número de soldados, con 1.550 efectivos, los 160 millones gastados hasta la fecha en cooperación al desarrollo, y los 60 comprometidos hasta el 2012, sitúan a España entre los países más comprometidos con la reconstrucción del país. En el plano militar, el coste de la operación ronda los 2.000 millones de euros desde el 2002. Todos los proyectos de desarrollo se han realizado en Badghis, una provincia del oeste de Afganistán, con unos 450.000 habitantes y una extensión similar a la de Badajoz.
En este territorio el analfabetismo afecta a dos de cada tres personas, la gestión del agua es limitada, la dependencia agrícola muy grande, la movilidad reducida y la inestabilidad creciente. En conclusión, la «situación socioeconómica es extrema», según un informe de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Aeci). La Aeci está presente en Afganistán desde finales del 2005 para colaborar en la reconstrucción. El objetivo es que las empresas y el personal afgano lideren los proyectos de reconstrucción, el último paso antes de que la agencia regrese a España.